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La accion especial del árnica sobre la estremidad de los vasos sanguíneos arteriales, y hasta en el sistema capilar en general, se confunde con su accion sobre la fibra orgánica, accion que parece directa si se considera que el carácter del árnica es obrar de la circunferencia al centro, y de afectar todos los sistemas, especialmente las membranas fibrosas, el periostio, las membranas serosas y hasta las mucosas.

Los dos puntos estremos de esta accion, sus dos polos, son los centros nerviosos y sus irradiaciones á las superficies interna y esterna; de aquí nace la influencia directa de la belladona, ya sobre los centros nerviosos y sanguíneos, ya sobre la piel y las mucosas, hasta el punto que se ha podido muy bien decir, que uno de los efectos fundamentales de este medicamento era un éstasis sanguíneo en la red capilar.

Se puede comparar su accion sobre el sistema capilar venoso á la del mercurio sobre el sistema linfático y sus capilares, y á la del fósforo sobre los capilares arteriales. La accion del carbon vegetal está caracterizada, como la del arsénico, por la ataxia é infiltracion sanguínea violenta, que conduce á la gangrena en los efectos de este, y á la asfixia en los del carbon.

Para que no se extinguiese del todo la memoria de su pasado, peinábase el recio pelo en brillantes tufos sobre las orejas y conservaba luengo en el occipucio el sagrado mechón, la coleta de los tiempos juveniles, signo profesional que le distinguía de los otros mortales. Cuando Gallardo se enfadaba con él, su cólera ruidosa de impulsivo amenazaba siempre a este adorno capilar.

No podemos decir que el árnica amortigüe la circulacion capilar como el carbon vegetal, porque el éstasis sanguíneo que determina en las últimas ramificaciones del sistema arterial, y no venoso, no es un éstasis pasivo: su accion es erética; produce en los vasos un movimiento de constriccion, por una accion especial sobre la fibra orgánica, ya muscular, ya fibrosa, siendo opuesto en esto á la stafisagria, cuyos equímosis son pasivos.

La árnica está, pues, indicada por la condicion de que la irritabilidad de la fibra, el eretismo y la afeccion de la red capilar y nerviosa constituyen el fondo de la enfermedad ó son el efecto de una conmocion, de una violencia esterior, y aun del estupor seguido de reaccion.

Los éstasis capilares con cefalalgia frontal, producidos por el calor y el ardor de las estufas en las habitaciones, exigen acónito; pero árnica es preferible cuando estos éstasis capilares, estas especies de congestiones son ocasionadas por una marcha forzada al sol, como lo hemos observado frecuentemente en las columnas espedicionarias de Africa, cuando nuestros soldados caian asfixiados ó atacados de una apoplejía capilar.

Nuestra esperiencia no nos permite apoyar ó rechazar esta medicacion. Mas sea de esto lo que quiera, la brionia, repetimos, goza de una accion esténica electiva sobre el sistema nervioso periférico, sobre las membranas, los tejidos fibrosos y el sistema capilar, y de un modo secundario sobre los sistemas absorbente, exhalante y gástrico.

De lo espuesto se deduce, que son propias del árnica las afecciones con aumento de irritabilidad, eretismo sanguíneo y tension de la fibra, aun en los períodos malignos y atáxicos, siempre que, como hemos dicho, procedan de la periferia, que tengan su punto de partida en el sistema capilar y en las últimas ramificaciones nerviosas, aun cuando la causa no sea una lesion esterior y mecánica, pues basta que la red nerviosa esté particularmente afectada por la causa morbífica.

Su edad no pasaba de veintiséis años. Tenía la barba negra, los ojos ídem, el pelo ídem, el entendimiento ídem; mas su filiación era difícil en lo tocante a la primera de estas señas personales, pues muy a menudo variaba la ornamentación capilar de su cara; de modo que si este mes se le veía con barba corrida, el que entra llevaba patillas; al año siguiente aparecía con bigote solo; después con bigote y perilla, como si quisiera inscribir en su cara, con la navaja de afeitar, la caprichosa inconstancia de sus pensamientos.