Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 19 de junio de 2025
Pocos sabían como él despertar el buen humor en las tertulias, hablar con donaire de las mil frivolidades que constituyen el encanto de la buena sociedad. «Mi fuerte y mi recurso supremo para extasiar a las tertulias solía decir con ironía, es el teatro Real.» Porque entonces, como ahora, la conversación amena por excelencia en Madrid era la de la ópera, y aquél era tenido por hombre más discreto y agradable quien proporcionase en las reuniones datos más fidedignos acerca de la vida privada de los tenores y barítonos.
Minghetti, como todos, la dejaría morir, la dejaría padecer, sin padecer ni morir con ella... ¡El parto! Crueldad inútil, peligro inmenso... para nada: ¡qué estupidez! Las mujeres felices, las mujeres entregadas a la alegría, al arte..., a... los barítonos..., las mujeres superiores, no parían, o parían cuando les convenía, y nada más. ¡Parir! ¡Qué necedad! ¿Cómo no había previsto el caso?
No se respira con el pecho, declara con su voz del Profeta, un poco enronquecida; se respira con el vientre. Por su procedimiento ha cambiado ya numerosos barítonos en bajos y no escasos tenores en barítonos, sin contar los que ha dejado afónicos. Pero él continúa imperturbable su degollina vocal.
Palabra del Dia
Otros Mirando