DON EDUARDO. ¿Quién dice que el dinero no sirve alguna vez de algo? pero no muy a menudo ... y si uno va a considerar todos sus inconvenientes ¿crees tú que ... no son éstas que dan las nueve? ¡Cáspita y qué tarde!... Con esto y con que haya salido ya mi escribano, nos quedemos también sin comer.... Adiós vida mía, abrázame. DOÑA MATILDE. Anda con Dios.