Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 7 de julio de 2025
Estas formas del filósofo aleman aunque poco á propósito para ilustrar la ciencia, no tendrian otro inconveniente que el de fatigar al lector, si se las limitase á lo que hemos visto hasta aquí; pero desgraciadamente, ese yo misterioso que se nos hace aparecer en el vestíbulo mismo de la ciencia, y que á los ojos de la sana razon, no es ni puede ser otra cosa que lo que fué para Descartes, á saber, el espíritu humano que conoce su existencia por su propio pensamiento, va dilatándose en manos de Fichte como una sombra gigantesca, que comenzando por un punto acaba por ocultar su cabeza en el cielo y sus pies en el abismo.
Los médicos de Madrid pedían a Felipe IV que se dejara la basura en las calles, «porque siendo muy sutil el aire de la ciudad, ocasionaría grandes estragos si no se impregnaba del vaho de las inmundicias». Y un siglo después, un teólogo famoso de Sevilla retaba en un acto público a que discutiesen con él esta tesis: «Más queremos errar con San Clemente, San Basilio y San Agustín, que acertar con Descartes y Newton.»
El principio de Descartes era digno de mas detenido exámen para quien trataba de inventar un sistema; oponerle que no podemos decir luego, es repetir el manoseado argumento de las escuelas; y el afirmar que no podemos decir, yo pienso, es contrariar un hecho de la conciencia que no han negado los mismos escépticos.
Horacio Vernet es en pintura, lo que San Bernardo en religion, lo que San Agustin en moral, lo que Descartes en filosofía, lo que Bichat en ciencia, lo que Federico de Prusia en política, lo que Guttemberg y Colon en el invento, lo que el Dante en la poesía épica, lo que Petrarca en la poesía lírica, lo que Shakspeare en la dramática, lo que Cervantes en el romance y en la novela, lo que Bellini é Hyden en música, lo que Montgolfier, Vaucauson y Fulton en industria y comercio.
Concibamos una manzana: hagámosla de repente inextensa; ¿á qué se reduce? Prescindiré por ahora de si tiene razon Descartes cuando hace consistir en la extension la esencia del cuerpo; pero sé muy bien que sin la extension no concibo el cuerpo. No afirmo la identidad de dos cosas, sino la inseparabilidad de dos ideas en nuestro entendimiento.
Rousselot concede a nuestros místicos, y sobre todo a Santa Teresa, este gran valor psicológico: la compara con Descartes: dice que Leibnitz la admiraba; pero Rousselot niega casi la trascendencia, la virtud, la inspiración metafísica de la Santa. Puntos son estos tan difíciles, que ni son para tratados de ligera, ni por pluma tan mal cortada e inteligencia tan baja como la mía.
Descartes acepta basta las últimas consecuencias de esta doctrina.
Dos sentidos del principio de Descartes. Se explica la mente del filósofo. CAPÍTULO XVIII. Mas sobre el principio de Descartes. Su método. Ambigüedad del lenguaje de Descartes. Su idea capital. Su duda metódica. En qué sentido es posible. Aplicaciones. Observacion sobre los extravíos de los reformadores. Acuerdo de Descartes con todas las escuelas. Locke. Condillac.
Vieta expone y aplica el principio de la expresion general de las cantidades aritméticas; Descartes hace lo mismo con respecto á las geométricas; Newton asienta el principio de la gravitacion universal; él propio, al mismo tiempo que Leibnitz, inventa el cálculo infinitesimal; y las ciencias naturales y exactas alumbradas por una grande antorcha marchan á pasos agigantados por caminos antes desconocidos. ¿Y por qué? porque la inteligencia se ha aproximado á la unidad, ha entrado en posesion de una idea matriz en que se encierran otras infinitas.
De lo contrario seria preciso abrazar la opinion de Descartes, de que la esencia del cuerpo la constituye la extension. ¿Qué sabemos sobre si puede haber cosas que tengan partes y no sean cuerpo? Además, que suponiendo el espacio distinto del cuerpo, y sin embargo verdadera realidad, seria indispensable suponerle substancia, pues no estaria inherente á nada.
Palabra del Dia
Otros Mirando