La sufragista es una mujer, producto de nuestros tiempos de libertad; instruída como el hombre, conoce y no rehuye las responsabilidades que tiene en la familia; pero a la vez esta libre de preocupaciones y cree sencillamente en el deber de compartir con el hombre los trabajos concernientes al mejoramiento social, al bienestar público de la comunidad en que vive; cree que por lo mismo que en el hogar hay deberes asignados a su sexo, tiene asimismo deberes que desempeñar en la vida pública.