Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 23 de julio de 2025


Se le figuró que aquellos dos se reían, se burlaban de su impotencia; le vino á la memoria lo que él había dicho «no los cederé sino al que los regase con su sangre y enterrase en ellos á su mujer y á su hija»...

Cuando he vuelto en y he podido darme cuenta de este acontecimiento, cuando he reflexionado sobre la siniestra casualidad que nos había preparado una entrevista al pie de un sepulcro, cuando he previsto todo lo que nuestra conversación había de tener de penoso y la magnitud de las nuevas impresiones que debían atormentar mi corazón, he deseado que un abismo se abriese a nuestros pies y nos enterrase a los dos juntos. «¡Usted aquí!», he dicho al fin. « ha respondido , en estos lugares llenos de usted y entre mis recuerdos dichosos es donde quisiera vivir siempre, y este pensamiento es el que ha encaminado hoy mis pasos hacia aquí

También deberían destinarse para aumentar esta renta los derechos que se tuviese a bien el imponer por las sepulturas de la iglesia, de modo que el que se hubiese de enterrar en ella, fuese indio o español, pagase la sepultura, y el que no, que se enterrase en el cementerio; y también debería tener su parte la fábrica de la iglesia en el arancel que debería formarse para los derechos que habían de pagar los españoles que se avecindasen en estos pueblos.

En los periódicos se habían publicado artículos acerca de él; unos de burla, otros en serio, sosteniendo la tesis de que constituía un fenómeno mental, un caso de estudio, invitando al director del Hospital-manicomio a que hiciese con él experiencias científicas, y proponiendo que cuando muriese no se le enterrase sin antes haberle sacado el cerebro, a fin de analizarlo.

Dimmesdale cuando en cumplimiento de su promesa pidió al anciano Rogerio Chillingworth los auxilios de su profesión, estaría contento con que mis labores, y mis penas, y mis pecados, terminaran pronto junto con mi existencia, y lo que en es terrenal se enterrase en mi sepultura, y lo que es espiritual me acompañara á mi morada eterna, antes que poner á prueba vuestra habilidad en beneficio mío.

Refirióme luego cómo el Santo Oficio de la Inquisición prohibió que se enterrase a Herrera en lugar sagrado y cómo fué inhumado el sangriento cadáver en la huerta, en donde marcaba su sepultura lo que yo había confundido con un asiento. En la tarde de ese día emprendimos el regreso a México, y durante todo el trayecto, no pude distraer de mi mente el suceso que tanto me había impresionado.

Palabra del Dia

godella

Otros Mirando