Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 20 de junio de 2025


¡Vamos, vamos, poca broma, D. Andrés! exclamó ella riendo. Aquél persistió en sujetarla. ¡Que voy a tirar la herrada, déjeme usted! No obedeció. ¡Que la dejo caer sobre usted! En los movimientos que hizo para desasirse, la herrada se tambaleó y soltó buena parte de agua, que vino a dar sobre el rostro y cuello de la joven. Al sentir la frialdad, dejó escapar un grito. ¡Pobrecilla! ¿Te has mojado?

Añejas historias, sin tiempo ni comarca. Unas sombrías, otras milagreras y fascinadoras. Consejas de tesoros ocultos, de agüeros, de princesas, de ermitaños. Una vieja esclava, herrada en la frente, sabía cuentos de aparecidos. Ramiro la escuchaba con singular atención, cada vez más goloso de pavura y de misterio. La estancia era un vasto recinto que ocupaba casi todo el plano de la torre.

Acaeció que la víspera del día señalado, estando Sebastián á la puerta de su casa, que proyectaba transformar en suntuoso palacete, vió á la niña de la fuente que pasaba descalza y con la herrada en la cabeza.

Juan Sánchez, maestro mayor de las obras de Sevilla, que dírigia las de nuestras famosas Casas Capitulares, vecino en la Magdalena, vendió á Alonso Martín tratante en esclavos una esclava morisca herrada en la cara con vnos letreros en que dizen «Juan Sánchez, cantero24 Noviembre de 1555 .

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando