Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 29 de junio de 2025
El fué quien tuvo tal confianza en su fuerza y en su ánimo, en el vigor de su brazo, en la aspereza del golpe, en la pesadez del arpón: él quien creyó poder atravesar la piel y la muralla de grasa, la dura carne del animal.
El siglo XVI, más atrevido, creíalos todavía «diablos disfrazados de hombre,» indignos de ser tocados más que con el arpón. Cada día se hacían más raros, cuando á algunos descreídos pasóles por la imaginación especular con ellos conservándolos y enseñándolos. ¿Nos ha quedado siquiera algún resto, alguna osamenta de ellos?
La propiedad que tienen estos animales de acudir al resplandor del fuego la aprovechan los filipinos para pescarlos sin gran trabajo: encienden hogueras en las vintas y en la playa, y cuando acuden los clavan con el arpón. Otras veces emplean una red con bolsas donde caen los peces al saltar.
Al odio á la Naturaleza que tuvo la Edad Media hase añadido la aspereza mercantil, industrial, armada de máquinas terribles, que matan desde lejos, sin peligro, á montones. A cada nuevo progreso en las artes, nuevo progreso de barbarie feroz, progreso de exterminio. Ejemplo: el arpón lanzado por una máquina rápida cual el rayo.
Palabra del Dia
Otros Mirando