United States or Faroe Islands ? Vote for the TOP Country of the Week !


El trabajo de nuestros madereros de Europa es mucho más penoso. La tala gradual de los bosques de la llanura les ha obligado á continuar su industria en los accidentados desfiladeros de las sierras.

Porque así podríamos perder el tren y desistir de este viaje, para nosotros estéril y para ti penoso. ¡No sean pavos! Subo a saludar a la familia y despedirme, Lorenzo; bajo en seguida. Están en el balcón; nosotros ya nos despedimos.

Cesaron las conversaciones mantenidas a media voz, y un silencio hostil y penoso empezó a gravitar sobre todos aquellos hombres. Jaime se apoyó en una pilastra del porche, alta la frente, arrogante el ademán, destacando su figura sobre el fondo del horizonte, como si adivinase los ojos que en la obscuridad estaban fijos en él. Sentía cierta emoción, pero no era de miedo.

De modo que , pobre, miserable, destinada a un trabajo rudo y penoso, mal alimentada, mal vestida, sin fuego con que calentarte, sin lecho en que dormir, ¿estás resignada con tu suerte? , señor, contestó Amparo repitiendo su triste sonrisa. ¡Oh! no conoces al mundo, eres muy joven; estás soñando. Me he criado en una casa de vecindad y tengo ya catorce años. ¿Pretendes tener experiencia?

¿Qué lleva usted ahí?... ¿Es la caja de las herramientas? El hombre pareció dudar, pero al fin se le impuso la enérgica expresión interrogativa, e inclinó la cabeza afirmativamente. Después el silencio se hizo largo y penoso. Unos presos colocaban la cama de aquel hombre en un rincón de la sala.

Soy hombre que valgo para cualquier cosa, y en Cataluña basta que yo me presente para que se arme la gorda... Pasando a otra cosa, yo trabajo bien y gano; espero una herencia... No le faltará a usted nada. Quiero a otro hombre repitió Isidora, creyendo que esta afirmación daba a tan penoso asunto el corte brusco que más convenía.

Mucho, mucho. Pero son datos preciosos. Vamos a otra cosa. Un coronel de Artillería, cuya nombre debe usted saber, se presentó en el despacho de Andréu, primo y compañero mío, hace quince años, y le habló de un asunto penoso y delicado. Al día siguiente Andréu había extendido un documento que llamamos acta de reconocimiento. Adelante.

En efecto apuntó gravemente el Sr. de las Matas, el trabajo expuesto y penoso de las minas no es propio de los hombres libres, tengan ó no derecho de ciudadanía. Pienso que es solamente adecuado para los esclavos tracios y paflagonios, y aun si se quiere, para los periecos, gente ruda por lo regular y cuyas vidas no tienen mucha estimación.

Pero doña Cristina levantó la voz un poco más, como si tuviese que hacer un esfuerzo para soltar algo penoso y Pepita la oyó decir con gran dificultad, vacilando á cada sílaba «Mon... gros... loup... cheri...» No: aquello no iba con ella... ¿Pero por qué decía su madre tales cosas? ¿Qué lobo era aquel, en francés, que su madre llevaba tan trabajosamente hasta los oídos del buen Padre?

Este ramo, que en el estado presente no es posible adelantarlo, si se extinguieran las comunidades podía ofrecer muchos aumentos; es la siembra y cultivo del tabaco facilísima a cualesquiera particular que esté dedicado a la agricultura, pero el beneficiarlo después de recogida la hoja es penoso a los que no tenían libertad, tiempo y proporciones para ello, y mucho más el beneficio del tabaco negro para el que son necesarios muchos aperos.