United States or Bermuda ? Vote for the TOP Country of the Week !


La misma antigüedad le el presbítero D. Francisco Sanchez de Feria, hijo del conocido autor de la Palestra Sagrada, en su Descripcion moderna y antigua de la ciudad de Córdoba que posee m. s. é inédita nuestro erudito y bondadoso amigo el Sr. D. Valentin Carderera.

Estaba mal casada, sobre eso no hay que decir, y era muy desgraciada, no era joven ya, pero por eso mismo la amé más todavía, pues había sufrido mucho... Bella en extremo todavía, aunque rubia; y a más de una honestidad timorata que me desesperó más de una vez... Porque, en fin, aunque me era sagrada, yo tenía veinte años... Pero había que respetarla o alejarme de ella...

La casa de Elorza se pobló de caras extrañas. Una muchedumbre, compuesta en su mayoría de gente artesana, invadió la escalera, los pasillos y hasta la habitación de la enferma, con hachas de cera en las manos. El cura, con el monaguillo delante y la sagrada bolsa colgada sobre el pecho, atravesó por el medio y se introdujo en la alcoba. Don Mariano había huido a esconderse.

Layard en la biblioteca de Asurbanipal en Nínive: poemas ya arcaicos ocho siglos antes de Cristo, y traducidos los más de la lengua sagrada de los acadies, entonces tan muerta como el latín ahora entre nosotros. Y esto no debe maravillarnos, porque según Roisel, en Los Atlantes, toda cultura viene de éstos, antes de que la hubiera en Caldea, en Asiria, en Egipto o en punto alguno de Oriente.

Decir gracias y escribir donaires es de grandes ingenios: la más discreta figura de la comedia es la del bobo, porque no lo ha de ser el que quiere dar a entender que es simple. La historia es como cosa sagrada; porque ha de ser verdadera, y donde está la verdad está Dios, en cuanto a verdad; pero, no obstante esto, hay algunos que así componen y arrojan libros de como si fuesen buñuelos.

La Virgen tenía una corona de hierro, en cuyos picos debió de haberse enredado una cometa de algún chico de la vecindad, pues un jirón de papel, todavía suspendido junto al cuerpo de la sagrada estatua, a impulsos del viento se movía. El papelejo fué lo que a me pareció un brazo que se movía y una mano que me llamaba.

Aquí pensaba yo lucirme describiendo las bellezas naturales de la isla, sus antiguallas, sus famosas ciudades, como Gnosos y Gortina, los vestigios del Laberinto donde estuvo encerrado el Minotauro, los esquivos lugares en que los dáctilos y los curetes bailaban sus danzas guerreras en torno del futuro monarca de los hombres y de los dioses, la sagrada caverna en que durmió su sueño secular Epiménides, y el punto en que se embarcó Ariadna con el falaz e ingrato Teseo, que luego la abandonó en Naxos, de donde la sacó en triunfo el dios Ditirambo con toda aquella comitiva estruendosa de faunos y de ménades, que tan gallardamente nos describen los poetas.

Acerca, de ese regocijo y de esa pompa, algo se pudiera decir. ¡Qué calamidad la del pueblo francés! Adorar hoy para quemar mañana; quemar ayer para adorar hoy. Pero estamos en la capilla de San Gerónimo, en lo que fué tumba de un cautivo, un cautivo que ese pueblo adora, y ante la sagrada veneracion que un pueblo profesa á un gran cadáver, debo callar.

La Pasión, obra en verso en diferentes dialectos filipinos, es no sólo la Pasión de Cristo, sino que comprende una especie de abreviado de la historia sagrada. Las Novenas son libritos devotos dedicados a un Santo cuyo favor se invoca para obtener de Dios tales o cuales mercedes.

Estos dramas religiosos, en cuanto se colige de los restos que se conservan, consistían generalmente en historias dialogadas de inconmensurable extensión, sin enlace dramático entre sus distintas escenas; en representaciones de la vida entera de un santo, y hasta en sumarios de toda la historia sagrada.