United States or Saint Pierre and Miquelon ? Vote for the TOP Country of the Week !


Con la seguridad de hacerlo mal, pero con el propósito firme de servirle a usted fielmente, allá va, a la buena de Dios, la pintura que me encomienda; y «si sale con barbas, san Antón...»

Y al pronunciar Antoñita estas palabras era su acento tan grave y revelaba tal resolución, que Amaury quedó asombrado al oírla. ¡Vaya! ¡vaya! exclamó procurando tomar en broma la afirmación de Antoñita. ¡A otro perro con ese hueso! ¿Va usted a decirme eso a que conozco tanto al feliz mortal que habrá de hacerle mudar de intención?

Yo te saludo con el alma extática, Que siempre fué por tu esplendor fanática Queriendo verte ondear en el confín. Rotos los lazos de la unión política, Bendícete mi patria en la hora crítica como al emblema de un amor sin fin... Ved la otra que se ostenta dominante Llena de juventud y de vigor, Y porque es ella fuerte va delante Deslumbrando con su áurico fulgor.

Felizmente el actual gobierno se aplica ya con mucho conato en mejorar estos caminos, deseoso de dar mayor impulsion al comercio. Se han renovado algunos antiguos, y hase abierto uno nuevo de veintidos leguas, que va de Apolo hasta Guanay.

, hasta ahora; pero ¿quién responde? Tantas veces va el cántaro a la fuente.... Don Fortunato es una malva, corriente; no es un Obispo, es un borrego, pero.... ¡Le tengo en un puño! Ya lo , y yo en otro; pero ya sabes que es ciego cuando se empeña en una cosa; y si Su Ilustrísima polichinela da otra vez en la manía de que pueden decir verdad los que te calumnian, estás perdido.

Pablo el ermitaño vive largo tiempo en una ermita solitaria, exclusivamente consagrado á la devoción y contemplación de la divinidad. La obra comienza con una escena realzada por la solemnidad y santidad de las fiestas del descanso, á que se entregaban los antiguos patriarcas. Pablo, después de orar, cae en un letargo, durante el cual sueña que va á ser condenado en el juicio final.

En mi casa... estamos de toda confianza... Puedes ir como estás ahora..., menos lujosa aún... y hasta puedes llevarte allí la labor... Ya verás cómo te distraes allí por las noches. Tu hermanita se distraerá también, porque van a casa pollos proporcionados a su edad e irán más cuando sepan que va ella. En cuanto a tu marido..., no es un requisito indispensable que te acompañe siempre.

El viejo Zapican con grande maña El escuadron y gente bien regia, Abayuba el sobrino con gran saña En seguimiento va del que huya. Su grande lijereza es tan estraña, Que nadie por los pies le escabullía, Cheliplo y Melibon, que son hermanos, Pretenden hoy dar fin de los cristianos.

De todo rumbo surge el vibrante grito de los vendedores de diarios que pululan llenando las calles como esas bandadas de avecillas que en el bosque cantan cuando el día llega, y es de admirar el contraste que ofrecen esos pilluelos diligentes y honrados, que a pulmón lleno proclaman su luminosa mercancía, pasando rápidos y sonoros por el lado del «repartidor de diarios» que, silencioso y grave, va echando por entre buzones, celosías y rendijas la doblada hoja impresa que aquéllos pregonan a gritos.

Lenta y gravemente se adelanta su magnífico caballo... Pero no va nadie en la silla. En lo alto de la escalinata aparecen cuatro sombras, y desaparecen al punto en las tinieblas. ENRIQUE. ¡Adiós, amor mío! ELSA. ¡Un momentito más! ENRIQUE. Están ya a la puerta. Hemos convenido en que si yo no los respondo a la tercera llamada, invadirán el patio del castillo.