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Distinguió al pie de la cuesta que ocupaba su castillo varias columnas de ataque que habían pasado el Marne. Los asaltantes estaban inmovilizados por el fuego nutrido de los alemanes. Avanzaban á saltos, por compañías, tendiéndose después al abrigo de los repliegues del terreno para dejar pasar las ráfagas de muerte.

Los cogonales ó carrizales, según la situación del terreno, adquieren más ó menos desarrollo y según éste tiene distintas aplicaciones.

En mitad del parque, sobre una eminencia del terreno, habían levantado los jesuítas una imagen de San José, con un arco de focos eléctricos.

Si de los autos pasamos al examen de los entremeses, nos hallamos en terreno muy diverso. Estos pequeños dramas burlescos, que á menudo son sólo escenas aisladas sin verdadero interés dramático, fueron, sin duda, escritos en algunos ratos de ocio por un poeta tan incesantemente ocupado; pero su veloz pluma supo también trazar al vuelo rasgos felices y peculiares de este género de poesías.

Pasada la vadera, volvía a subir el terreno, que era un inmenso lastral como los montes áridos que le servían de fondo, particularmente hacia la izquierda.

Aquel encanto de los ojos, aquel prodigio de color, remedo de la naturaleza sonriente, encendida por el sol de Mediodía, empezó a perder terreno, aunque el pueblo, con instinto de colorista y poeta, defendía la prenda española como defendió el parque de Monteleón y los reductos de Zaragoza.

El abogado se sonrió; el joven se dejaba llevar á otro terreno y allí le iba él á embrollar, ya estaba embrollado.

En cuestión de derivaciones y de etimología, fácilmente se penetra en el terreno de la fantasía, y con consecuencias muy lógicas se puede llegar á probar los absurdos más grandes.

Su terreno puede llamarse infecundo, porque, segun las señales y las noticias de los indios, las grandes mareas lo inundan; y aunque parece frondoso, lo causan estas inundaciones que dejan pantanos intransitables, á lo menos en las cuatro primeras leguas de su boca.

En lo más alto de la ladera, donde el barranco no es más que un repliegue del terreno, los pinos, en actitud grave y de hojas casi negras, se ven reunidos como en un concilio.