United States or Belarus ? Vote for the TOP Country of the Week !


18 para juzgar al huérfano y al pobre; no volverá más a hacer violencia el hombre de la tierra. 1 Al Vencedor: [Salmo] de David. En el SE

Adentro del carruaje, la dichosa Sol era toda exclamaciones: jamás, jamás, en su vida de huérfana pobre, había visto Sol correr los ríos, vestirse a los bosques fuertes de campanillas moradas y azules, y verdear y florecer los campos.

Así, como he contado, me dejó mi pobre tercero amo, do acabé de conoscer mi ruin dicha; pues, señalándose todo lo que podía contra , hacía mis negocios tan al revés, que los amos, que suelen ser dejados de los mozos, en no fuese ansí, mas que mi amo me dejase y huyese de .

Juan responde con una carcajada; y con los ojos brillantes, la boca pegada a la oreja de Franz, murmura: ¿Crees , pues, mi pobre amigo, que yo sería capaz de ir a vivir y a morir al extranjero sin haberla visto antes una sola vez? ¿Crees que tendría yo valor para contemplar el mar durante cuatro semanas, sin precipitarme en él, si no la hubiese visto otra vez?... ¡Me faltaría la respiración, el alimento se me quedaría en la garganta, me consumiría vivo, si no la hubiese visto una vez más!

Dan las dos en el reloj de la ciudad, un antiguo marabut, cuyas frágiles paredes blancas percibo desde aquí... ¡Pobre diablo de marabut! ¿Quién le hubiese dicho hace treinta años que un día tenía que sostener en medio del pecho una gran esfera municipal, y que todos los domingos a las dos en punto daría la señal a todas las iglesias de Milianah para tocar a vísperas?... ¡Tilín, talán!

Y porque aquél está pobre y necesitado, mandamos quemar las coplas de los poetas, como franjas viejas, para sacar el oro, plata y perlas, pues en los más versos hacen sus damas de todos metales." Aquí no lo pudo sufrir el sacristán, y levantándose en pie, dijo: "¡Mas no, sino quitarnos las haciendas!

Y en veinticuatro horas se me muere, como si el cielo quisiera castigarme. Es verdad que me queda mi nieto; pero ese Juanito en nada se parece a su padre, y te lo confieso: le quiero poco; no veo en él más que un reflejo lejano de mi pobre hijo. De mi pasado, de aquella época que fue la más feliz de mi vida, sólo me resta Visitación. Es el retrato de la pobre muerta; ¡la adoro!

Siles no era un escritor extraordinario, pero pocos hombres tenían más jugoso temperamento ni más riqueza de ilusión que este pobre cantor errabundo que ha caído para siempre, sin dinero y sin gloria, y al que las gacetas sólo han dedicado un pequeño lingote de prosa vulgar.

El pobre murió de mala manera. ¿Le conoció usted?... No, hija mía. Siga usted, que la oigo con mucho interés.

Garay, que del Perú viene huyendo, Habiéndole Valero con presteza Seguido, y estorbarle pretendiendo La entrada, al Argentino sin pereza Camina: mas Valero le siguiendo, Sentido ha sido dél. ¡Cuanta tristeza El pobre de Valero ha recibido, Por ver que de Garay fuera sentido! Valero una jornada atras camina, Garay envia por él con tres soldados.