United States or Cayman Islands ? Vote for the TOP Country of the Week !


Pero yo no soy más que una mujer y no tengo valor para decidir entre lo que me parece mi deber y lo que es mi deseo ... , que tienes la firmeza necesaria, manda; yo obedeceré. Mauricio movió la cabeza. No, Herminia; yo no puedo hacer lo que pides.

Y tercer escollo: que, poseedora de la ciencia del mirar y de las otras ciencias que la del mirar presupone, no atines a disimular y velar esta sabiduría, y te acusen y zahieran de lagarta, de licurga, de desenvuelta y libre, y de harto sabida para soltera. Me parece, Beatriz, que para evitar esos escollos lo mejor es dejarse llevar del impulso.

Una, para consolarse, recordó malignamente al ingeniero Torrebianca. ¡Y será capaz de venir esta tarde con los queridos de su mujer!... Parece imposible que un hombre sea tan... ciego. Deben marchar de acuerdo los dos.

Este Herrera Goya, según parece, era un ente raro, sobre todo para su época. Solía hacer experimentos con yerbas, coleccionaba insectos, y tenía hasta medio centenar de gatos, que lo seguían por todos lados. No dejó de causarme desagradable sorpresa este extremo, que relacioné en seguida con el misterio que deseábamos aclarar. Comprendo tu sobresalto, continuó Antonio.

Yo las seguí maquinalmente.... «Parece que...» Estas palabras resonaban en mis oídos como los rumores de lejana tempestad. ¡Bien sabía yo hasta dónde era capaz de llegar la murmuración villaverdina!

Una imprudencia, por pequeña que fuese, y estaba perdida; el menor descuido, y en vez de ingeniosa enamorada, semejaría codiciosa enredadora. ¡Triste condición de toda mujer amante y burlada, que al reconquistar el bien perdido, parece trapisondista despreciable! Capítulo XIX De cómo Cristeta representó en un palco mejor que cuando lo hacía en el escenario

Verdad purísima, santa verdad es lo que he referido, aunque parece inverosímil, y aún me callo otras cositas por no ofender el decoro nacional. Después, la graciosa procesión recorrió las calles de Cádiz con grande alegría de todo el pueblo, que se regocijaba con tal motivo extraordinariamente, sin decidirse por eso a vestir a la antigua... ¡Tan grande era su buen sentido!

Hasta cuando la planta de las colinas inferiores continúa apareciendo al lado del sendero contiguo á la nieve, parece que cambia poco á poco. Abajo ya se marchitaron sus flores, cuando en las alturas apenas están en capullo: allí ha pasado ya por el verano: aquí todavía está en la primavera.

Parece que se está en la calle, nada falta para ello... La función había ya empezado cuando entré. Con gran extrañeza por mi parte, los actores no son malos, me refiero a los hombres; tienen arranque, vida... Casi todos ellos son aficionados, soldados del ; el regimiento está orgulloso con esto y va todas las noches a aplaudirlos.

El autor dramático, y en esto se parece al orador, no puede, ni debe ser así. Es menester que su espíritu esté en intima y constante comunicación con el espíritu de un público numeroso: que él y dicho público se comprendan y se compenetren. Sólo de esta suerte puede haber autores dramáticos. Los que de otra suerte escriban, podrán ser todo lo que quieran menos tales autores.