United States or Palau ? Vote for the TOP Country of the Week !


«Que él decida indicó Juan José tomando al muchacho y poniéndole en medio de la sala . Riquín, ¿quieres irte con tu madre?». Tan fuertemente negó con su cabezota, que se le cayó la mitra. En realidad es fuerte cosa que le propongan a un hombre abandonar su diócesis para irse con una mala mujer... «¿Que no, dices que no?». El chico dijo entonces claramente: «No quielo».

Leonora, al cantar frente a aquel hombre famoso, al agarrar en pleno dúo aquellas manos que habían besado las reinas del arte, sentíase profundamente turbada. Era el mundo soñado en su cuartito de Milán, las grandezas aristocráticas que llegaban hasta ella en el ambiente fuertemente perfumado que envolvía a Salvatti.

Todos brincaban por el salón, acometidos de un vértigo en el cual debían de tener alguna parte el manzanilla y el amontillado que nos habían servido. Cuando nos cansamos, fuimos de nuevo a sentarnos. Cogí su abanico, le di aire fuertemente, tan fuerte, que lo rompí, lo cual fue ocasión de nuevas bromas y risas. No habíamos hablado nada de nosotros mismos.

Apenas el gitano pronunció estas palabras, cuando de la tartana cayó al agua una especie de puente flotante, e inclinado, que estaba amarrado a la borda del buque por largos brazos de hierro. El caballo apoyó fuertemente sus patas delanteras sobre la extremidad de la plancha y de un vigoroso salto ganó el combés que se elevaba muy poco por encima del mar.

Tal había sido la declaración del tejedor. Sin embargo, Silas se aferraba fuertemente a la idea de que el buhonero era el culpable probablemente por la única razón que ésta le presentaba la imagen clara de un sitio en que podía estar su oro, después de haber sido quitado del escondite: le parecía verlo ahora en la caja del buhonero.

Yo adoro la caridad: los hombres que tienen caridad son mis hermanos. Débil, con la cabeza llena de una vaguedad febril, con el corazón fuertemente agitado, fui conducido a mi casa, donde hube de meterme en cama.

Después de buscar á tientas el llamador, lo hizo sonar dos veces fuertemente. Tiraron desde arriba por un cordel y se abrió la puerta. Entonces Pedro no hizo más que depositar con presteza el cuerpo del señorito en tierra, y echarse á huir como un gamo por las calles. No fué pequeño el alboroto que se armó en la casa de D. Baltasar así que hallaron al joven en semejante estado.

En un lugar hemos visto una escena que nos ha hecho impresion profunda; el recuerdo del lugar nos recordará siempre la escena, y el recuerdo de la escena nos recordará siempre el lugar: aquí encontramos dos representaciones internas, fuertemente enlazadas, sin que por esto atribuyamos á los objetos la relacion de causalidad.

Sentí que el corazón me latía fuertemente; me pasó como un carbón encendido por la garganta; turbóseme la vista, y sin saber cómo, me encontré á sus pies, diciendo: Más vale morir una vez que morir mil veces cada día.

Amparo volvió a casa desolada, impresionada fuertemente; se encerró en su aposento, y yo respeté su dolor. Me vi obligado a continuar durante algunos días mi antiguo papel de hermano. Al fin, una mañana, Amparo me dijo: Siéntate a mi lado, Luis. Me senté en el sofá junto a ella. Necesito que me expliques me dijo ciertas cosas que no comprendo bien.