United States or Taiwan ? Vote for the TOP Country of the Week !


De vez en cuando, el rostro lívido de aquél aparecía en la ventanilla, y sus ojos negros y hundidos paseaban una mirada angustiosa y feroz por la multitud; pero inmediatamente se dejaba caer hacia atrás, escuchando el incesante discurso del sacerdote. El cochero, enmascarado como un lúgubre fantasma, animaba al caballo con su látigo, conduciéndolo hacia el suplicio.

No hay veneración que valga. El canciller Bacon, preconizado por muchos como fundador, norte y guía de todo positivismo, ha sido injuriado de la manera más feroz por no pocos de los mismos positivistas.

Lo que hice fué reconocer mi error en cálculos de cronología, para los cuales no había contado yo con la feroz y desgreñada revolución de Francia. En vista de esta revolución, el bien relativo, el estado de libertad y de adelantamiento para las sociedades, que yo fantaseaba como inmediato, se hundió hacia adentro, en los abismos del porvenir, lo menos dos ó tres siglos.

La mesa está puesta, y entre el husmillo de una sabrosa sopa de anguila, queda todo en silencio, ese gran silencio de los apetitos robustos, que solamente interrumpe el feroz gruñir de los perros lamiendo a tientas sus cazuelas delante de la puerta. La velada no se prolongará mucho. Ya no quedamos junto al fuego, que también parpadea, más que el guarda y yo.

Aquel maldito despertador que estaba sobre la mesa se la recordaba de continuo, pareciéndole que al compás de su siniestro tic-tac regulaba su paso, rapidísimo como nunca, y lleno de ira mandó a la mujer que lo parase; mas entendió esta que quería verlo para enterarse sin duda de la hora que apuntaba, y apresuróse a llevárselo... Diógenes, arrancándoselo de la mano con un arrebato feroz de rabia, estrellólo contra la pared de enfrente, haciéndolo trizas.

Ya. dijo el militar, contento de haber encontrado un motivo, aunque pequeño, para suponer que aquel hombre no era enteramente feroz. ¿Y lo pasó usted bien? ¡Ah! : me alegré mucho de estar allí. ¿Y no quiera usted volver? ¡Oh! , exclamó Clara, sin poder contener una exclamación expansiva.

Y bien, si era vencido, no había de ser sin una feroz resistencia, sin luchar cuerpo a cuerpo con el odiado enemigo y tratar de ahogarle entre sus brazos robustos.

Un desgraciado con la cabeza cubierta con un capuchón por cuyos agujeros lucían sus ojos, estaba dando vueltas al rededor del patio, como una bestia feroz. Andaba lentamente y su cadena sujeta encima de la rodilla preducía un chirrido lúgubre. Enmascarado, solitario, silencioso, aquel hombre daba espanto. ¿Qué hace ahí ese hombre? preguntó Tragomer al vigilante. Se pasea durante media hora.

Tenía ante él á Sánchez Morueta, con el puño levantado, las barbas en desorden, y en los ojos una expresión feroz: el deseo de exterminar á la canalla impía que insultaba á las personas decentes y había hecho refugiarse á las señoras en la iglesia. Al reconocer á Aresti, bajó el brazo y la cabeza como avergonzado.

Los gritos y alaridos mensageros Allí son de una nave á otra enviados, Y cada cual socorro demandaba, Que igual era el dolor que se pasaba. Librónos nuestro Dios de aquel tormento, De aquel trance y dolor tan doloroso, Desistiendo el feroz y crudo viento, Y viniendo bonanza con reposo.