United States or Slovakia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Pues vete mirando desde el muelle hacia tierra: toda la villa, con su barrio de labradores, que parece un aduar de marruecos; detrás del aduar, el estero con sus junqueras, adonde viene a desembocar el río que ha bajado de aquellas alturas rozando un buen pedazo del perfil de la vega.

Igual movimiento por más días aún; se vive en la calle, en la parroquia privilegiada. Pocos días después, otra parroquia, otra fiesta en otro barrio. ¿Pero hasta cuándo fiestas? ¡Qué! ¿No se cansa este pueblo de espectáculos? ¿Qué entusiasmo es aquél, que no se resfría en un mes? ¿Por qué no hacen todas las parroquias su función a un tiempo?

Pues, señor, la cosa llegó á excitar vivamente la atención de la autoridad, y el miedo del barrio rayó en espanto; la Berrona seguía, sin embargo, haciendo todas las noches su horripilante procesión.

Cuando el buñó se creía en situación para sostener una casa y contaba con un compadre que se prestase a ser padrino, corriendo con todo el gasto de la boda, robaba a la buñí, llevándosela a la casa de sus padres. ¡Gran escándalo en el barrio! El bato de la novia salía a la calle gritando que iba a matar a su hija.

Barrio al oriente, en la parte baja de la ciudad, en que vivian los mozárabes, separado de la Almedina ó parte alta, llamada tambien la villa despues de la reconquista, por una fuerte muralla, que, corriendo de N-E. á S-O., dividia á Córdoba en dos porciones desiguales. Créese que habia ademas en la Almedina otros muros interiores que la dividian en cuatro ó cinco barrios diversos.

Pero al punto trataba de alejar estas ideas, que no le traían más que tristezas y cavilaciones. Es aquel barrio tan apartado, que parece un pueblo. Comunícase, de una parte con San Andrés, y de otra con el Rosario y la V.O.T. El vecindario es en su mayoría pacífico y modestamente acomodado; asentadores, placeros, trajineros.

Constituída la visita en el barrio, el Juez mayor, ayudado de otros munícipes, inquiere, inspecciona y averigua los adelantos y mejoras que se han llevado á cabo en el trascurso del año.

A su vez estaba casado, bastantes años hacía, con la hija de un comerciante de Zaragoza, llamado D. Tomás Osorio, padre también del conocido banquero madrileño del mismo nombre, que tenía su hotel con honores de palacio en el barrio de Salamanca, calle de Ramón de la Cruz.

Las ocho serían cuando salió para hacer verdadero lo imaginado; pero como tenía que ir desde la calle de Hernán Cortés a la de Moratines, en el barrio de las Peñuelas, deteniéndose y preguntando por no conocer muy bien a Madrid, ya habían dado las diez cuando entró por el conocido y gigantesco paseo de Embajadores. No le fue difícil desde allí dar con la morada de su tía.

Algunos cantores de los campanilleros llegaron á adquirir cierta celebridad, no sólo en la hermandad á que pertenecían, sino en todo el barrio, principalmente en los tiempos en que más en auge estuvieron, entablándose en no pocas ocasiones competencias muy empeñadas entre los cantores de una parroquia y los de otra, competencias de las cuales resultaron algunas veces disgustos y altercados.