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¡Si usted tuviera la bondad de ser un poco más franco! se atrevió a decirle don Simón. ¡Pssée! refunfuñó don Zambombo . ¡Como tampoco ustedes lo son!... ¿Cómo que no? Es la verdad. Y si no, a verlo vamos. Yo me comprometo a votarle a usted con todos mis amigos... Muchas gracias, señor don Jeromo. Con tal de que usted se comprometa a otra cosa.

Lucía está mirando para acá y se desprendió, y volvió a prender, para que Lucía lo notase, y supiera que pensaba en ella . Hermanita dijo de pronto Sol en voz baja ; hermanita, ¿no te parece que Juan Jerez es muy bueno? Yo quisiera verlo más. Nunca lo he visto cuando he ido a casa de Lucía. Yo no qué tiene, pero me parece mejor que todos los demás. ¿ crees que él querrá mucho a Lucía?

A las once estaban los náufragos a sólo tres millas de la costa de Nueva Guinea; pero tenían la primera piragua media milla detrás de ellos y la segunda poco más de una. ¡Veo un río! exclamó Hans. ¿Cerca? preguntó el Capitán, que no podía verlo por estar de espaldas a la costa. , tío; ahí enfrente de nosotros. Lleva hacia él la chalupa. ¿Es ancho? Tendrá algo más de un cable.

Era cristalino y puro, y se desataba tan gentil y suavemente que daba gloria verlo marchar por la pradera. La condesa significó el deseo de reposar un instante en su orilla. Estaba cansada y le placía en extremo mirar el curso del agua. Además, tenían tiempo de sobra para estar en la romería.

A pesar de la ley musulmana, Sid'Omar bebe un poco de él, cuando los criados no pueden verlo... Al concluir la comida, pasamos a la habitación de nuestro huésped, donde nos ofrecen dulces, pipas y café... El mueblaje de este dormitorio es sencillísimo: un diván, algunas esteras; al fondo, un gran lecho altísimo sobre el cual hay almohaditas rojas bordadas de oro... Pende de la pared una antigua pintura turca representando las proezas de cierto almirante Hamadí.

Cuando ha afirmado bien la plaza y habituado a la guarnición improvisada a pelear diariamente, como si fuera ésta una ocupación como cualquiera otra de la vida, vase al Brasil, se detiene en la Corte más tiempo que el que sus parciales desearan, y cuando Rosas esperaba verlo bajo la vigilancia de la policía imperial, sabe que está en Corrientes disciplinando seis mil hombres, que ha celebrado una alianza con el Paraguay, y más tarde llega a sus oídos que el Brasil ha invitado a la Francia y a la Inglaterra para tomar parte en la lucha; de manera que la cuestión entre la campaña pastora y las ciudades se ha convertido al fin en cuestión entre el manco matemático, el científico Paz y el gaucho bárbaro Rosas; entre la pampa por un lado, y Corrientes, el Paraguay, el Uruguay, el Brasil, la Inglaterra y la Francia por otro.

Caminaban por una senda estrecha abierta entre los maizales. El teólogo iba delante y el P. Gil detrás. Súbito aquél paró en firme el paso y la lengua. Al doblar un recodo se encontró de frente con el hijo de Cosme, que traía colgado a la espalda un cesto mediado de anguilas. Verlo el teólogo y arrojarse sobre él sin conmiseración fue todo uno.

Esteban encontraba intolerable que este señor, que no era mas que un pariente lejano de su abuela, se mezclase en los asuntos de la casa, pretendiendo dirigirle á él como un padre. Pero aún le irritaba más verlo de buen humor y con pretensiones de gracioso. Le daba rabia que llamase á su madre Penépole y á él joven Telémaco... «¡Tío latero y pesado

Acaso no es más que un vicio de su mente, contraído hace largo tiempo y que se manifiesta mecánicamente. No quise hacerle ver que me había entristecido y traté de responderle con buen humor. La prueba de que Dios existe es que eres bueno... ¿Eso crees? ¿Es eso una prueba?... ¿Cómo te arreglas para verlo así? Eres bueno y Dios me ha dado un padre como . ¡Ah!

Cuando el Señor la lleve de este mundo, que la llevará... desgraciadamente, ¿se salvará Vd. con haber tenido aseada la casa? ¡La casa limpia y el alma negra por el pecado! ¡Toda la pulcritud para uno mismo, todo el trabajo para lo propio, y ni una visita a la casa de Dios, ni un pensamiento para su divina Madre! ¡Da ira el verlo!