United States or Peru ? Vote for the TOP Country of the Week !


Dice Pedro explicó la señorita que estuvo ahí la cadena con que tenían sujeto sus abuelos a un negro esclavo.... ¿No parece mentira que se hiciesen semejantes crueldades? ¡Qué tiempos tan malos, Julián!

Viendo las ceremonias del culto, que en otros tiempos le conmovían, sentía impulsos de protesta, deseos de gritar a sacerdotes y acólitos que se retirasen, pues su tiempo había pasado, la fe había muerto, y únicamente por rutina y por miedo a la opinión ajena volvía la gente a aquellos lugares que antes llenaba de la mañana a la noche el fervor religioso.

-Eso de gobernarlos bien -respondió Sancho- no hay para qué encargármelo, porque yo soy caritativo de mío y tengo compasión de los pobres; y a quien cuece y amasa, no le hurtes hogaza; y para mi santiguada que no me han de echar dado falso; soy perro viejo, y entiendo todo tus, tus, y despabilarme a sus tiempos, y no consiento que me anden musarañas ante los ojos, porque dónde me aprieta el zapato: dígolo porque los buenos tendrán conmigo mano y concavidad, y los malos, ni pie ni entrada.

Ella, que los había buscado en otros tiempos por ambición ó por codicia, necesitaba ahora á Watson. No lo deseaba solamente porque era capaz de hacerla salir de su crítica situación, sino por él mismo; porque era la juventud, la fuerza y la ingenuidad, todo lo que puede dar apoyo á una vida fatigada.

Los tiempos mudaron, el emigrado pudo volver á su país, la suerte coronó sus fines, y juzgó llegada la hora de casarse, pero no con la inglesa, no con la madre de sus hijos, que permanecia en su país.

Nosotros hemos conocido los malos tiempos; nos ha costado sudar la plata. No como otros, que llegan con toda clase de comodidades y quieren de golpe conquistar una fortuna; como si la fortuna estuviese ahí, esperándoles en el muelle.

En otros pueblos, ya que no se conserven los palacios de los conquistadores, descubre á cada paso el viajero aun en las casas mas humildes, acá una hermosa ventana gótica por cuya entallada ojiva trepan las hojas de la enredadera y de la yedra, allá un lindo ajimez árabe tras cuya transparente celosía se cree distinguir aun el animado rostro de una gallarda mora, acullá un sillar romano donde estan entalladas en caractéres ya medio borrados las hazañas de los que mas engrandecieron el antiguo Imperio; en Córdoba se observa cuando mas á lo largo de sus calles una que otra galería construida en nuestros tiempos, uno que otro ventanage historiado, bello solo por su aspecto pintoresco.

Por la tarde, iba a dar una vuelta a pie hasta el puente de las Almas: era la hora más pesada del día. La turba abyecta se paraba a contemplar los bostezos del Nabab fastidiado. A veces sentía la nostalgia de mis tiempos de empleado.

Gallardo, con su memoria fisonómica de hombre de muchedumbres, reconocía sus rostros y admitía el tuteo. Eran camaradas de escuela o de infancia vagabunda. No marchan los negocios, ¿eh?... Los tiempos están malos pa toos. Y antes de que esta familiaridad los animase a mayores intimidades, volvíase a Garabato, que permanecía con la cancela en la mano.

En aquellos tiempos no había libros que contasen las cosas: las piedras, los huesos, las conchas, los instrumentos de trabajar son los que enseñan cómo vivían los hombres de antes.