United States or Bolivia ? Vote for the TOP Country of the Week !


¡Oh! ¡no seré soldado! exclamó don Juan . Mi rey, mi orgullo, sois vos. , , seréis soldado mientras sea necesario que lo seais; pero después no: ¡no quiero morir como mi madre! ¡Oh, Clara de mi alma! exclamó el joven, recibiendo el puro, el glorioso relámpago de amor que destelló de los ojos de doña Clara al pronunciar sus últimas palabras ; ¡vos me amáis!

2 Como vosotros lo sabéis, lo yo; no soy menos que vosotros. 3 Mas yo hablaría con el Todopoderoso, y querría disputar con Dios. 4 Que ciertamente vosotros sois fraguadores de mentira; sois todos vosotros médicos nulos. 6 Oíd, pues, ahora mi disputa, y estad atentos a los argumentos de mis labios. 7 ¿Habéis de hablar iniquidad por Dios? ¿Habéis de hablar por él engaño?

REY. ¡Ah, hidalgo! Oíd. CELIO. ¿Qué me queréis? REY. Advertid A don Tello que he llegado De Castilla y quiero hablalle. CELIO. Y ¿quién diré que sois? REY. Yo. CELIO. ¿No tenéis más nombre? REY. No. CELIO. ¿Yo no más, y con buen talle? Puesto me habéis en cuidado. Yo voy a decir que Yo Está a la puerta. Vase. ENR. Ya entró. CONDE. Temo que responda airado, Y era mejor declararte.

Estábamos locos de entusiasmo. ¡Pero qué veo! Gabriel, y , Marijuán, ¿no os entusiasmáis? Sois unos gaznápiros. Aquello fué prodigioso.

Hay un medio, señora, de que ese sacrificio no caiga sobre vos. ¡El medio de vivir como dos amigos, como dos hermanos! Si no sois más que mi amiga ó mi hermana, podíais ver mañana á un hombre... amarle... ¡No he amado cuando era libre!... ¡y me han importunado!

De persona es esta carta que os alegrará, cuando el duque, por ser vuestro padre y por pensar como pensáis, os entristece. Pero, ¿de quién es? Oledlo, y ver si trasciende á hermosura, y á amor, y á gloria para vos, que, como sois joven, buscáis la gloria en una mujer. ¡De doña Clara! exclamó alentando apenas el joven.

Sois muy cruel, Nancy dijo Godfrey contrariado . Podríais alentarme a volverme mejor. Me siento muy desgraciado; pero vos no tenéis corazón. Creo que tienen menos los que comienzan por proceder mal respondió Nancy, dejando percibir de pronto y a pesar suyo un pequeño rasgo de indignación. Godfrey quedó encantado con aquel leve arranque.

Pareced a mi presencia tales como sois, uno despues de otro o todos juntos, pero en vuestra forma acostumbrada. Nosotros no tenemos otra forma que la de los elementos de los que somos el alma y el principio; pero designanos la forma que quieras, y sera la que adoptaremos.

El gusto, si está olvidado, ¿Qué pregunta le he de hacer? Que el gusto de la mujer No quiere ser preguntado. Mas ¿qué importa, ojos, oídos, Boca, manos, gusto, haceros Testigos, si he de perderos Sólo porque sois queridos?

¡Ah, os creo! ¡os creo, porque sois caballero y cristiano, y no me engañáis! os creo, y creyéndoos soy feliz. Tomad, don Francisco, tomad; esta carta es para vuestro amigo. Ya sabía yo que había de ser correo; pero no importa. Sólo siento una cosa. ¡Qué! Que acaso no podréis ver á mi amigo tan pronto como quisiérais. ¿Y por qué? Acaso no podáis verle hasta después de la media noche.