United States or Åland ? Vote for the TOP Country of the Week !


En la abstraccion hay el resultado de la comparacion; mas la comparacion. En la numeracion hay la comparacion perenne, ó el recuerdo de ella. Lo que hay convencional es el signo, nada mas. Si no existiendo ninguna criatura intelectual, existiesen cien seres distintos entre , habria en la realidad el número.

Ya lo sabemos, dijo Sanjurjo. Hoy, si no fuera por un quehacer que nos ha salido, hubiéramos ido a allá. Al mismo tiempo hacía un signo de inteligencia a don Víctor. Pues Pepe debió de irse esta mañana con Fermo. Eso me dijeron al menos ayer noche. Los notarios se miraron consternados. ¡Qué le decía yo a usted, Sanjurjo! exclamó don Víctor.

Mas, en lo alto, los vientos con sus marchas Pasan para engarzar vivas escarchas En derredor del cristalino encaje Que en excelso ropaje El tronco viste... ¡signo de grandezas! Bajo una blanca trama de finezas. Misterioso tamiz de las virtudes Que alcanzan a divinas altitudes, y parece una espléndida bandera Que cubre un mástil de genial quimera.

Establezco esta proposicion: «la identidad puede ser orígen de representacionpero niego las siguientes: «la identidad es orígen necesario de representacion;» «la representacion es signo de identidadNada determino con respecto á la aplicacion de las relaciones entre la representacion y la identidad en lo que concierne á los seres finitos.

Para indicaros que ha visto dos objetos cualesquiera, procurará acompañar la expresion del objeto con el signo de dos. Lo mismo sucederá con el tres, y con el cuatro. En llegando á números mas altos, ya el signo se hace mas indispensable; ya la idea del número no se representa tan fácilmente, y por tanto le será todavía mas necesario el vincularla.

Cuando se hubo vestido subió a la terraza del Casino para pasearse; Huberto se aproximó a ella y le dijo: ¿Me permite usted quedarme un momento a su lado? La he visto venir desde lejos; para es un placer verla caminar. Son muy pocas las mujeres que saben moverse con gracia; es un verdadero signo de raza.

De pronto fué Elena la que preguntó: ¿Cómo se llamaba aquel muchacho americano compañero suyo?... Creo que fué el único hombre que me interesó un poco entre los muchos que me buscaban... Tal vez le amé, por lo mismo que nunca me deseó verdaderamente. Algunas veces, muy de tarde en tarde, me he acordado de él... ¿Se casó? Hizo Robledo un signo afirmativo y ella siguió hablando. No diga más.

Vamos a ver, ¿cree usted o no, que los hombres sean generalmente unos bandidos? Juan apoyó la punta de su nariz sobre el índice de su mano derecha, lo que es signo seguro de profunda meditación. Después de haber reflexionado un minuto me dio esta respuesta, neta y decisiva: Óigame señorita, le diré a usted: puede ser que sea así, y puede ser que no.

Soy lo mismo que esos enfermos que van de balneario en balneario, siempre con la esperanza de que en el próximo les espera la salud. Todos en el buque deseaban llegar al término del viaje, Maltrana veía un signo de impaciencia en la rapidez con que los pasajeros cambiaban de vestido, creyendo haber avanzado considerablemente, cuando aún estaban cerca de Europa.

Pues Cobo Ramírez y otros babiecas como él, que la han llenado la cabeza de viento.... ¡Sin duda espera la tonta que venga un príncipe de sangre real a buscarla!... Ramoncito negaba belleza a su adorada. Es signo de hallarse profunda y sinceramente enamorado el hombre; no ser hija de la vanidad su afición. El exceso de amor le arrastraba a injuriarla.