United States or Tajikistan ? Vote for the TOP Country of the Week !


Entre uno de los montones de paja se movia un pequeño objeto revolcándose sobre algunos harapos: un grito agudo me hizo ver que era un niño. Muy cerca estaba sobre otro monton de tamo una vieja tullida que pocos momentos despues se arrastró sobre las manos y las rodillas para recoger la limosna que mi compañero le arrojó desde la escalera.

Al empujar la puerta vieron al joven revolcándose por el suelo y mesándose los cabellos mientras lanzaba imprecaciones y palabras incoherentes. Carlota quiso precipitarse a su socorro, pero la retuvo Miguel. ¡Silencio! le dijo al oído. No temas. Tu marido se halla en la hora negra del artista. Las sacras musas duermen o están ocupadas en este momento y no pueden atenderle.

Al ver la sardinera que por aquel día no había modo de reñir con nadie desde el balcón, encerróse también en su caverna; sacó de un escondrijo una botella de aguardiente, bebióse cerca de la mitad; y cuando los vapores de aquel veneno comenzaron á adormecerla, acercóse balbuciente y con paso mal seguro á la sucia y fementida cama, y en ella se desplomó, revolcándose allí como cerdo en su pocilga.

Pusiéronse los amigos de por medio, alborotose el café, rompiéronse algunos vasos: al día siguiente de madrugada efectuábase el duelo más allá de la Fuente Castellana, y el campeón de la de Córdoba caía al suelo revolcándose en su propia sangre.

Inútiles fueron los esfuerzos denodados de éstos por llegar hasta la altura; la estrechez y la pendiente del camino y los obstáculos que añadían á su paso los cuerpos de hombres y caballos hacinados y revolcándose en sangrientos montones sólo les permitían avanzar lentamente, haciéndolos fácil blanco de las flechas enemigas, y muy pronto se oyó el toque de retirada.

El caballo marino la sangría, cuando se siente cargado de sangre, abriéndose la vena con punta de caña que le sirve de lanceta, y el barro de venda, revolcándose en él, con lo que cierra la cisura.

Siempre que Apolonio veía dos dándose de puñadas y revolcándose por el suelo, si se levantaba alguna polvareda, decía: «Ha llegado el punto trágico; eso no es polvo blanco, son las divinidades violentas, envidiosas de la vida ligera de los hombres, diluidas en el aire fino.» ¡De qué buena gana se hubiera diluido Apolonio en el aire fino para ir a mezclarse en las disputas enzarzadas a causa de su afortunado rival, como la guerra de Troya por Helena; intervenir por modo invisible y aniquilar a todos los secuaces de Belarmino!... La venganza es el placer de los dioses.

Salíamos ya casi del estrecho y empezábamos á ver la lucha infatigable entre las grandes ondas del Océano y las menudas olas del Mediterráneo, las primeras lentas, formidables, inmensas, invadiendo el canal con majestad, las otras inquietas, rápidas, revolcándose sobre la gran sabana líquida y queriendo salir al ancho espacio.

»Para concluir, mi señor don Alejandro: continúan los cerdos revolcándose en las calles sin empedrar, y las gallinas picoteando el césped del encachado de la plaza; el casón histórico, llamado de los Capellanes, se desplomó en abril del año pasado; está mal sostenido con puntales lo que queda del convento de Premostratenses; se va a apuntalar la fachada norte de las Casas Consistoriales, y en la calle del Cáncamo se abrió de repente una sima, tres años hizo en febrero, y sin rellenar se encuentra a la hora presente.

Y luego, revolcándose en aquella tristeza contra la cual nada podía su dominio de hombre de sociedad, se espetó otro monólogo : Ya estoy entrando en el periodo pueril... La tontería y la incapacidad me invaden... Esta mujer con su frialdad y su ironía me ha puesto el pie sobre la cabeza y me la ha aplastado, como la Virgen la de la serpiente... Ya empiezo a estar ridículo...