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Mas ¿quién es? ¿Cuál es su nombre? ¿Cómo la viste?... Porque me hayas ofendido con tu abandono, ¿quieres ofenderme más con tu culpable silencio y criminal reserva? La hora del peligro pasó ya, y las entradas y algaradas en tierra de cristianos las guardo hasta mejor tiempo; para hacer más doloroso el mal es fuerza dar a los hombres algún aliento y descanso.

Había creído que le echaban aquel hombre para explorarle, y le había tratado con la mayor reserva. Pero muy pronto se convenció de que el cocinero obraba de buena fe, que estaba desesperado, que tenía miedo. Comprendió, además, que siendo como era avaro y de una manera exagerada Montiño, no había que pensar en imponerle reparaciones respecto á su dinero.

Según nuestras noticias, Dupont continuaba en Andújar, reforzado por la división de Vedel. ¿Habían trabado acción con nuestro tercer cuerpo y el de reserva, que, pasando el río por Marmolejo, estaban situados en la orilla derecha?

Durante mucho tiempo constituyó un misterio el paradero del hermano mayor de mi madre, hasta que se supo que había muerto. Comprobé, con esa penetración que es frecuente en los chicos, que en mi familia existía cierta reserva al referirse a mi tío Juan; ni mi madre, ni su hermana Úrsula, ni mi abuela, querían hablar del desaparecido, y este misterio y esta reserva excitaron mi fantasía.

Como Ramón iba al colegio, hacía cuentas en su pizarra y leía libros de estudio, Lita creía en su ciencia. Después de su mamá, nadie le inspiraba mayor confianza. Sin embargo, desencantada esta vez por su respuesta, protestó, con cierta reserva de gran dama ofendida: Pues yo creo que hay hadas. Mírola Ramón casi con lástima...

Esta orden no tenía nada de agradable, porque el Duque, nada circunspecto en sus expresiones, no había guardado la menor reserva acerca del resentimiento que abrigaba contra el primer ministro Ensenada y los principales miembros del Consejo de Castilla, que le habían depuesto de su destino.

Esta vez la incredulidad del magistrado se manifestó sin reserva.

En Italia no es así: el doctor escribe ante el público como si estuviese solo; expláyase sin reserva con una superabundancia, una sensibilidad femenina, que hace asomar la sonrisa á los labios y llorar al mismo tiempo.

La suma virtud y exquisita delicadeza de estos primos lo ponía todo en reserva para el día dichoso en que la religión y las leyes consagrasen su unión indisoluble.

¿Cuáles son los cuatro caractéres de que hablé? La reserva, la intolerancia, la censura y el egoismo. La reserva es el producto de los desengaños. La intolerancia es el resultado inevitable del que ha aprendido; pero que ya no puede aprender, y vuelve los ojos tenazmente hácia lo que aprendió.