United States or Greenland ? Vote for the TOP Country of the Week !


Y al extender sus brazos con un gesto de inmensidad, como si nadie pudiese abarcar la fortuna de Jaime, añadía convencido: Un Febrer nunca es pobre. Usted no podrá serlo nunca. Después de estos tiempos otros vendrán. Jaime desistió de hacerle reconocer su pobreza. Mejor era que le creyese rico.

Y ¿qué temor de necesidad y pobreza puede llegar ni fatigar al estudiante, que llegue al que tiene un soldado, que, hallándose cercado en alguna fuerza, y estando de posta, o guarda, en algún revellín o caballero, siente que los enemigos están minando hacia la parte donde él está, y no puede apartarse de allí por ningún caso, ni huir el peligro que de tan cerca le amenaza?

Otros niegan que fuese fraile, y dicen que la pobreza le hizo refugiarse en el monasterio de Santo Domingo, como un parásito, viviendo de la sopa de la comunidad... El hambre fue el único miedo del héroe. Le habían predicho que moriría de inanición, y en sus expediciones cuidaba siempre de llevar alimentos en los bolsillos.

A lo que el mozo respondió: -El caminar tan a la ligera lo causa el calor y la pobreza, y el adónde voy es a la guerra. ¿Cómo la pobreza? -preguntó don Quijote-; que por el calor bien puede ser.

Vivía con extremada pobreza y vestía desastradamente; un sombrerete, con dos dedos de enjundia; un gabancillo de color café con leche, que había estrenado al venir a la Universidad y que llevaba con el cuello subido, por disimular la ausencia de camisa; pantalones con flecos, y botas como las consabidas.

Nos daba honesta y liberal pobreza El sustento bastante; que con poco Se suele contentar naturalezaEl primer infortunio que acibaró su ventura doméstica, fué la muerte de este mismo hijo Carlos, á los siete años de edad.

En la misma Sevilla han de haber vivido en el mayor aislamientoDe aquí infería el Conde que sus desconocidas, aunque sevillanas, habían vivido lejos del mundo, o por carácter tímido, o por excesiva pobreza, o por extravagancia del marido.

1 Y mirando, vio a los ricos que echaban sus ofrendas en el arca de la limosna. 2 Y vio también una viuda pobrecilla, que echaba allí dos centavos. 3 Y dijo: De verdad os digo, que esta pobre viuda echó más que todos; 4 porque todos éstos, de lo que les sobra echaron para las ofrendas de Dios; mas ésta de su pobreza echó todo el sustento que tenía.

Se ensució mucho papel y medio pueblo fué á declarar; pero nadie sabía nada. ¿De qué matrícula era el barco? Silencio; nadie le había visto los folios. ¿Quiénes lo tripulaban? Unos hombres que al varar habían echado á correr tierra adentro. Y nadie sabía más. ¿Y el cargamento? dije yo. Lo vendimos completo. Usted no sabe lo que es la pobreza.

Don Carlos Rojas iba también á aquella hora visitando su estancia y haciendo cálculos sobre el porvenir. Continuarían siempre sus tierras altas en la pobreza actual, no pudiendo dar alimento mas que á un número reducido de animales.