United States or Finland ? Vote for the TOP Country of the Week !


El crimen es para los fuertes que ó pueden soportarlo en silencio, ó librarse de él descargando de una vez su conciencia si encuentran el peso demasiado grave.

Me dejo arrastrar, y voy á parar como un madero sobre un banco de arena donde cristalitos de mica brillan como pepitas de oro y plata. Por el peso de mi cuerpo, el banco se hunde, los granos de sílex y las delgadas piedras cambian de punto.

«Cuando Antonio Pérez fué acogido en Francia por el Rey vuestro padre, y por atenuar su miseria le acordó pensión, deseando el extranjero acreditar el reconocimiento de los beneficios recibidos y ofrecer testimonio de que no por desgraciado era ingrato, dió al mismo Rey tres avisos que no son de poca consideración: ROMA, CONSEJO Y MAR. La advertencia del anciano español, consumado en asuntos de Estado, no ha de considerarse tanto por la autoridad del que lo daba, como por su propio peso

Batistet y los pequeños empezaron á llorar y Teresa continuó los alaridos como si su esposo se hallase en la agonía. Pero el herido no estaba para sufrir lamentaciones y protestó con rudeza. Menos lloros: aquello era poca cosa; la prueba estaba en que podía mover el brazo, aunque cada vez sentía mayor peso en el hombro. Era un rasguño, una rozadura de bala y nada más.

En la plaza de la blasonada ciudad nada había variado: la Parroquia estaba intacta, igual, como la dejé diez años antes, con su graciosa cúpula de azulejos, su torre arruinada, abriéndose al peso de sus campanas «ponderosas», como decía don Román la yerba crecida en el cementerio; el frontis del templo, festonado con espontáneos helechos que a lo largo de las cornisas lucían sus palmas séricas, y coronaban con gallardos plumajes el susodicho blasón que los villaverdinos ponen en todas partes.

Las lluvias habían disuelto y arrastrado lentamente el terreno en los alrededores, pero las pesadas piedras habían sido respeta das, y con su peso daban consistencia á los gigantescos pilares de arcilla que las sostenían. Cada promontorio, cada roca de la montaña tiene, pues, su aspecto peculiar, según la materia que la forma y la fuerza con que resiste á los elementos de degradación.

Por las orillas fértiles del Plata La gavilla de Rosas se dilata Amenazando hundir la Libertad: Montevideo grande, fiel, sublime, Bajo el enorme peso que la oprime Alza tranquila el último fanal.

Rosalía hubo de sentir frío en el pecho, ardor en las sienes, y en sus hombros los nervios le sugirieron tan al vivo la sensación del contacto y peso de la manteleta, que creyó llevarla ya puesta.

Basilio respiró como si un gran peso se le hubiese quitado de encima y respondió despues de una breve pausa: Señor, el honor que usted me hace confiándome sus planes es demasiado grande para que yo no le sea franco y le diga que lo que me exige está por encima de mis fuerzas.

Triste cosa, señor, lo que le ha sucedido a nuestro pobre amo se arriesgó a decir el bien enseñado servidor, que toda su vida la había pasado al servicio de los anteriores propietarios. Me temo que la pobre y joven señorita sienta demasiado el peso de su desgracia. Lo siente demasiado, Gibbons respondí, tomando un cigarrillo y quedándome de pie con la espalda hacia el fuego.