United States or Ethiopia ? Vote for the TOP Country of the Week !


47 Y si el peregrino o extranjero que está contigo, adquiriese medios, y tu hermano que está con él empobreciere, y se vendiere al peregrino o extranjero que está contigo, o a la raza del linaje del extranjero; 48 después que se hubiere vendido, tendrá redención; uno de sus hermanos lo rescatará;

Volviendo luego a andar con mayor lentitud y con cierta vacilación, como si el respeto le contuviera, siguió el pájaro peregrino caminando hacia Poldy, y parándose a cada dos o tres pasos como si aguardase el permiso de llegar hasta ella.

Satisfecho podía estar el Peregrino si no nublara un tanto los auspicios favorables la diligencia del Sr. Gil de Mesa en comunicarle nuevas de otro género. Habíale mostrado el Ministro Villeroy avisos de Flandes de andar por París el señor de la Pinilla de Aragón, de quien se decía haber tomado 6.000 ducados de oro á cuenta de la vida del fugitivo, yendo en su compañía un fraile y un criado.

Explicó entonces Abaris que él había estado en Aratispi; que allí había tenido amores con la madre de Echeloría, y que Echeloría era el fruto de dichos amores. Añadió luego que como entonces era él tan peregrino seductor, había tenido también amores en Vesci con la madre de Mutileder; y que por lo tanto, Mutileder era su hijo.

Cual rústico campanario Que en la campaña desierta Indica al hombre la puerta Del melancólico osario Que ampara su vecindad; Ahí estás, ombú gigante A la orilla del camino, Anunciando al peregrino Que bajo el tronco pujante Duerme por siempre un mortal.

Allí en campo cercado de arena miro brillar numerosa comitiva. ¿Serán éstos pacíficos viajeros, o salteadores que acechan los pasos del peregrino? Corro a ellos y no se mueven, les grito y nada me responden. ¡Oh Dios! éstos son cadáveres, es la antigua caravana exhumada por el viento del hondo de las arenas.

Por muchos años el libro de Relaciones, memoriales y cartas de Rafael Peregrino, escrito con suma habilidad por el Secretario de Estado que fué de Felipe II para vindicarse de las acusaciones de los tribunales y darse por víctima paciente de injustas persecuciones, ejemplo lastimoso de la crueldad del sino, ha servido al juicio de su persona, andando de mano en mano impreso en todas las lenguas y en multiplicadas ediciones, no por apología hecha de puño propio, parafraseada y puesta en la trompeta de la fama por el autor mismo, antes por Retrato al vivo del natural de la fortuna de Antonio Pérez, como título que aplicó más tarde al libro, ya que pasaba sin objeción ni respuesta.

Pues á mi vez prefiero la astilla de las puertas del templo, dijo por su parte Simón, y aquí os entrego tres ducados, de cuatro que me quedan. Y aquí van dos más, agregó Tristán. Y cuatro míos, dijo Roger. Con lo cual se despidieron del piadoso y cuitado peregrino, llevándose aquellas venerables reliquias tan impensada cuanto fácilmente adquiridas.

Repetidas veces, por ejemplo en el prólogo de El Peregrino, se disculpa de que éstas "no guarden el arte" alegando que el público las quiere así, y él no hace más que continuar las cosas tal como las ha encontrado, siguiendo el mal estilo que se ha introducido en el teatro español.

Pasaron ¡ay! pasaron las puras alegrias, Y errante y solitario por playas estrangeras Poeta peregrino, con quejas lastimeras, Al pais de mis recuerdos dirijo esta cancion. En vez de ornar con flores las cuerdas de mi lira, Pensando en Buenos Aires las riego con mi llanto, Y encuentro entre esas gotas amargas de quebranto En los recuerdos nobles viril consolacion. ¡Oh patria!