United States or Iraq ? Vote for the TOP Country of the Week !


Y veremos que no hay ninguno más pobre en la misma pobreza, porque está atenido a la miseria de su paga, que viene o tarde o nunca, o a lo que garbeare por sus manos, con notable peligro de su vida y de su conciencia.

Acaso algún filósofo antiguo ó moderno le haya sobrepujado por la viveza del ingenio, por la visión rápida y clara de los grandes problemas de la ciencia, pero ninguno tuvo jamás un rostro más grave, más absorto, más genuinamente científico que el tío Goro cuando de las ocupaciones manuales pasaba á las intelectuales.

Decía alabanzas de la dieta y que se ahorraba un hombre de sueños pesados, sabiendo que en su casa no se podía soñar otra cosa sino que comían. Cenaron y cenamos todos y no cenó ninguno.

Ese acrecienta como ninguno las potencias del alma, y, en un mismo día, asedia o se defiende, toma castillos o levanta cestones y palizadas, libra grandiosos combates, pone en fuga legiones inmensas, conquista mundos ignorados y maravillosos.

Ninguno. Si el señor de Miranda es una persona formal. ¿Usted le llama el señor de Miranda? No... él ya me advirtió ayer que le llamase Aurelio.... Pero como aún no adquirí confianza... y él tiene más edad.... En fin, no se me venía a la boca.

Pensé para mis adentros que querían otro par de mulas. ¿Y qué era? ¡Lo increíble! No ignorando, como no ignoraba ninguno de ellos, cuál es mi vida, mi padrastro, en presencia de mi madre, con su aprobación y moviendo la cabeza hacia donde estaba Inesilla, me dijo: «Anda, Nicolasa, ya que has hecho suerte, ¿por qué no te llevas a la chica?» ¡Qué atrocidad!

Infinitamente superiores á estas comedias son los ocho entremeses contenidos en la misma edición. Cervantes tenía todas las cualidades necesarias para brillar en este género dramático, y sin vacilar podemos decir que no ha sido superado por ninguno de los que le sucedieron.

Belarmino, después de saber que el filósofo hablaría ante señoras, ya no tenía interés ninguno en oírle. Pero se dejó llevar, con resignada indiferencia. Toda la tramoya había estado tan hábilmente desarrollada, que Belarmino, a pesar de su sagacidad instintiva, no sospechaba ser víctima de un engaño.

Y tan adentro me llegaron las mortificaciones, que poniendo mis cinco sentidos en el negocio aquel, conseguí pronto, ya que no la destreza de mis acompañantes, portarme de tal manera, que no fueran «enmendables» por ninguno de ellos los tiros que yo desaprovechara.

7 pero los cielos que son ahora, y la tierra, son conservados por la misma Palabra, guardados para el fuego en el día del juicio, y de la perdición de los hombres impíos. 9 El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; pero es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento.