United States or Germany ? Vote for the TOP Country of the Week !


Pronto, sin embargo, tomó su partido: acurrucóse de nuevo en la cama y juzgó lo más prudente darse allí mismo por muerto. ¿No era Currita quien le había metido en aquellos berenjenales?... ¡Pues allá se las compusiera ella como buenamente pudiese!... En vano le instaba la condesa, temblando de ira, para que se levantase y saliera a recibir la caterva de polizontes: Villamelón contestaba que estaba constipado, que estaba sudoroso y cogería de seguro un pasmo a poco que le diese el aire.

La plática comenzó á ser suave y cordial y entreverada de risas. La reconciliación estaba hecha. Al cabo de un momento Gabino pudo observar, sin embargo, que Soledad tornaba á ponerse seria. Antonio la instaba con dulzura: ella negaba vivamente haciendo repetidos signos con la cabeza. Excitada su curiosidad, el mancebo permaneció inmóvil á ver en qué paraba y lo que aquello significaba.

Dícese que un consejo de los principales del ejército instaba al general Ocampo para que lo prendiese, juzgase y fusilase; pero el general no consintió, menos acaso por moderación que por sentir que Quiroga era ya, no tanto un súbdito, cuanto un aliado temible.

Pero por verso privado de aquel esparcimiento, no gustaba que los demás se privasen, y con frecuencia instaba a su mujer para que saliese a tomar el aire. «Hijita, no qué me da de verte encerrada en esta cazuela. Yo no siento el calor; pero que no cesas de andar de aquí para allí, estarás abrasada.

De vez en cuando se atrevía algún cura a soltar frases de encomio a la habilidad de la guisandera; y el anfitrión, observando con disimulo quiénes de los convidados andaban remisos en mascar, les instaba a que se animasen, afirmando que era preciso aprovecharse de la sopa y del cocido, pues apenas había otra cosa.

Esta medida, como era natural, mantuvo y sobreescitó la general inquietud, ocasionando motines y alborotos que el capitan general tuvo que castigar con mano fuerte. El ayuntamiento le instaba á que constituyese una junta como las de la metrópoli, algunos dias antes de la llegada de un comisionado mandado por la junta de Sevilla.

Indiferente a los otros jóvenes, mariposones de casinos o estrellas de playa que exhibían sus gracias en las partidas de tennis y empleaban su ingenio en las sabias combinaciones del cotillón. Blanca respondía ingenuamente a las bromas de su hermano que le instaba a elegir un novio. No hay ni uno que se parezca a ti... En ese caso... ¿Por qué no después de todo?

Muerto Carlos el Hechizado en 1700, Felipe V, que lo sucedió, recompensó al conde de la Monclova haciéndolo grande de España. Enfermo, octogenario y cansado del mando, el virrey Brazo de plata instaba a la corte para que se le reemplazase.

Maximiliano no le instaba a que comiera, pues aquella actitud de su mujer tomábala él por querencia de privaciones, por iniciación del aniquilamiento, o apetito de muerte y liberación. Doña Lupe, fatigada de lidiar con tanta insensatez de una y otra parte, se retiró, dejándoles solos y diciendo: «Haced lo que queráis. Allá os arregléis a vuestro gusto.

Y se entró otra vez en la cocina, sin hacer caso de Ángela que le instaba con muchas lágrimas y gemidos para que fuesen en busca de su hermana. Corrieron buen espacio desalados, creyendo que los seguían. El que primero se cansó fue Andrés. Es inútil correr dijo poniendo una mano en el hombro de Rosa para detenerla. Nadie nos sigue.