United States or Samoa ? Vote for the TOP Country of the Week !


Eso quiere decir que tengo razón, aunque te parezca lo contrario; pues la música te haría evocar un cuadro en el que algo más interesante para ti te impresionó, uniéndose a la emoción musical que aisladamente, lo repito, es fugaz. ¡Pero si mismo acabas de hablar del poder evocador de la música!

Pero he aquí que un fresco aire de fuera ha venido a renovar el ambiente de este viejo café de la Luna, donde yo pasaba mis tardes gozando del placer de no hacer nada, placer digno de un Papa, y trazando a las veces raro suceso sobre la cuartilla, mis tristes o apacibles devaneos sentimentales. ¡El lugar era tan solitario y tan evocador!

Está ahora con los ojos obstinadamente humillados, por no recibir en ellos la imagen del abdomen, rotundo y endemoniadamente evocador, del señor Colignon. Pero, ¡mi Dios! exclama riendo el recién llegado , que ya le será a usté bien difícil olvidar y disimular.... Esta es una sucursal de la Rúa Ruera de otras veces. Belarmino está aquí; Apolonio está aquí; el usurero está aquí; usté está aquí.

Cuando ella se vincula con otra impresión; has estado en el teatro cien veces, habrás oído veinte o treinta óperas; pero sólo una mínima parte de éstas tendrá poder evocador en tu espíritu: las que estén vinculadas a sensaciones de otro orden. ¿Qué están diciendo ustedes de la música? preguntó Ricardo, que se aproximó arrastrando un grueso sillón de paja, en el que se sentó.

Era un puma que se había encogido para dormir en este refugio, dando una sorpresa formidable al nostálgico evocador de las serenatas de Brescia. Cuando tengamos agua y las tierras se rieguen continuaba González vivirán aquí miles y miles de familias.

Por eso he venido; cada que don Ricardo toca, siento una gran alegría, señor, y se me hace que es la niña Lola y que está la familia, y hasta me parece que el viejo anda por aquí. Es el poder evocador de la música, Baldomero; probablemente usted no ha oído aquí más que a las muchachas. Así es, don Lorenzo.

No hay tal; yo decía que la música no tiene poder evocador sino cuando está vinculada a sensaciones de otro orden; por ejemplo: yo he oído «Bohéme» una noche en que me declaraba a mi novia; ¡es hipotético, eh!, y en momentos en que ella me aceptaba vi a un bombero, en el paraíso, que se sacaba el morrión y se pasaba el pañuelo por la cabeza; pues desde entonces cada vez que oigo aquella ópera o que veo a un bombero secarse el sudor surge en mi memoria, el cuadro completo de aquella noche, sin que por esto pueda decir que hay un gran poder evocador en los bomberos que sudan...