United States or Réunion ? Vote for the TOP Country of the Week !


Si no te hubieras soterrado en tu dolor como un topo en su cueva, si no hubieras huido ante todo rostro humano, sabrías desde hace tiempo lo que hasta los gorriones se cuentan en los techos: que en la mañana de su muerte, yo recibí una carta de ella... , tío, de ella... ¡Oh, amigo mío! Me estás rompiendo los huesos. Escúchame primero tranquilamente. Y le contó lo que contenía la carta.

Escúchame, Catalina: eres la única mujer nacida para ; ... tienes todo lo que yo he soñado en la mujer... ya lo ves, te estoy hablando frío y desnudo como si hablara conmigo mismo.

Á la conclusión hay una batalla entre un tabernero, una castañera, un granuja callejero y otros héroes de igual jaez, que componen sus personajes. Después que han sucumbido la mayor parte en la contienda, termina la tragedia de esta manera: TÍO MATUTE. Aguárdate, mujer, y no te mueras... Ya murió: yo también quiero morirme, Por no hacer duelo ni pagar exequias. ¡Ay, padre mío! Escúchame.

¡Escúchame, hija mía!... Esta pasada noche reflexionaba... pensaba en ti... pensaba que yo era para ti todo lo que debo ser... todo lo que quiero ser... Soy una anciana enferma... Esa es mi excusa... Tus cuidados, tus buenos oficios me son preciosos, no lo oculto... sería para contrariedad muy grande verme privada de ellos. Pero, señora, yo absolutamente pienso...

Narada entonces habló así con Agni, dios del fuego, devorador de la ofrecida hostia, conductor alado del holocausto: ¡Oh, que te ocultas en el seno de los seres todos, que sin ti no serían, escúchame, Agni, que animas el universo.

Efectivamente, tan pronto como Amaury se acomodó en un asiento, le tomó el doctor la mano y mirándole fijamente, le dijo: Escúchame, Amaury: y yo somos como dos soldados que han peleado juntos en el campo de batalla; nos conocemos mutuamente, tenemos perfecta idea de nuestro valor y de nuestras fuerzas, y así podemos hablarnos con toda sinceridad, con absoluta franqueza. ¡Ay! repuso el joven.

¡Escúchame, desgraciado, tengo un medio de salvarte, un medio supremo; ya lo verás: el prestamista me ha concedido un plazo de veinticuatro horas, ¿sabes? y en estas veinticuatro horas se puede volver el mundo patas arriba, figúrate. Yo por un lado, por el otro: cavaremos, cavaremos hasta encontrar esa suma.

Herrero: a toda hora es el hierro quien manda: ¡es el dios! Si te cruzas de brazos, si doblas el cuello al sopor, en tu abulia torpe ya no escucharás la solemne voz del hierro, tu amigo... Escúchame, herrero, y forja otra hoz." ....................................... La segunda segur, la de hierro, fabricada está. Es como la ceja borrascosa y dura de un fiero titán.

Pasó mi brazo bajo el suyo y me llevó hacia un lado. No poeta, pero enamorado de ti, prima. Escúchame bien: te amo con toda la sinceridad de mi corazón. Saboreé la dulzura de esta frase y la de la mirada que la acompañaba, pensando que era una suerte que los hombres fueran inconstantes.

13 que respondas a Dios con tu espíritu, y sacas tales palabras de tu boca? 15 He aquí que en sus santos no confía, y ni los cielos son limpios delante de sus ojos, 16 ¿cuánto menos el hombre abominable y vil, que bebe la iniquidad como agua? 17 Escúchame; yo te mostraré, y te contaré lo que he visto; 18 lo que los sabios nos contaron de sus padres, y no lo encubrieron;