United States or Vietnam ? Vote for the TOP Country of the Week !


Ahora dicen que van a dar vista a don Pablo, y cuando él tenga vista nada tienes que hacer en Socartes. ¿Qué te parece mi idea?... ¿No respondes? Pasó algún tiempo sin que la Nela contestara nada. Preguntó de nuevo Celipín, sin obtener respuesta. Duérmete, Celipín dijo al fin la de las cestas . Yo tengo mucho sueño. Como mi talento me deje dormir, a la buena de Dios.

Fortunata le dijo con expresión fraternal y consoladora: «Mira, duérmete, descansa y no te acalores. Anoche has estado muy malito, y necesitas unos días para reponerte. Hazte cuenta que no estoy aquí, y a dormir se ha dicho». Si lo tranquilizó, no se sabe; pero ello es que se quedó dormida, y no despertó hasta las siete de la mañana.

Vestía un chaquetón del grueso de una albarda, y hacía rodar su gorra de pana entre los dedos con manifiesto embarazo mientras declaraba. La voz era bronca, como conviene a todo mayoral que se estime en algo; el estilo pintoresco, abusando un poco de los tropos. Pus a me dijo el amo: Lico, hay que dir a Peñascosa a por unos señores. No pases de la venta de Marica, y duérmete allí.

Cada uno tiene sus cositas que llorar repuso María con voz sofocada . Pero es muy tarde, Celipe, y es preciso dormir. Todavía no... ¡córcholis! , hijito. Duérmete y no pienses en esas cosas malas. Buenas noches. Cerráronse las conchas de almeja y todo quedó en silencio.

»Cuando entres en este cuarto no podré desearte la bienvenida: estaré enferma y quizá hasta mis labios se habrán cerrado para siempre. Todo lo encontrarás como tenías la costumbre de verlo en casa; todo esto estaba preparado para ti, y te esperaba desde hace mucho tiempo. Que sea el dolor o el gozo lo que te acoja en el umbral de esta casa, descansa en paz y duérmete con el sentimiento de estar en tu casa. Esfuérzate en amar a Roberto, como él mismo te amará. Entonces todo irá bien todavía, ya sea que Dios me deje con vosotros o que me llame a

«Duérmete y no pienses en tonterías» indicó ella que, movida de piedad, creyó oportuno y caritativo hacerle algunas caricias. Si no fuera por ti dijo él, como un niño mimoso , no se me importaría que la vida se me acabara... El mundo no vale nada sino por el amor. Es lo único efectivo y real; lo demás es figurado.

Amor mío, duérmete. No temas, hijo... No te suelto. EVARISTA. ¿Pero vamos o no? ELECTRA. Yo no voy... ¿Tienes hambre, sol mío? ¿tienes sed? Ved cómo a se agarra el pobrecito pidiéndome que no le abandone. ¡Egoístas! ¿No sabéis que no tiene madre? PANTOJA. Pero alguien tendrá que le cuide... Ea, basta. Llevadle pronto a su casa. PANTOJA. ¡Qué escándalo! EVARISTA. ¡Qué falta de sentido!

Ella se estrechaba suspirante contra el pecho del mozo, y decía: Tengo sueño.... Con los labios sobre los cabellos enmarañados de la niña, le iba contando el médico un cuento de hadas. Duérmete y sueña, que yo te voy a regalar unas cosas muy bonitas.... Vestidos de seda, cadenas de oro, anillos y pendientes....

¡Y ! añadió ella besándole en la frente . ¿Tienes sueño? , principio a tener sueño. No he dormido anoche. Estoy tan bien aquí... Duérmete, niño.... Principió a cantar como se canta a los niños para que se duerman. Poco después Pablo dormía. La Nela oyó de nuevo la voz de la Trascava, diciéndole: Hija mía... aquí, aquí. Los Golfines Teodoro Golfín no se aburría en Socartes.

¡Mira, si no te callas, te doy azotes!... Vamos, duérmete: si te duermes, te compraré un caballo para que vayas al Retiro montado como tu amiguito Julián... y después te llevo al Circo a ver los clowns... ¿no te acuerdas de los saltos que dan? ¡Qué saltos tan grandes sobre el caballo! ¿eh?... Y la niña rubia que se sube al trapecio, ¡qué bonita!, ¿eh?... Y después vamos a casa de Julianito, y comerás dulces... y otro día iremos a Leganés a ver a la tía Adelaida para que te regale el pajarito de cristal que canta dándole cuerda... y lo traeremos para casa, ¿verdad?... ¿No te gusta?