United States or Greece ? Vote for the TOP Country of the Week !


Yendo por este estero navegando Diez dias, que los tiempos no ayudaban, Por tierra los soldados van cazando, Que muy poco las balsas caminaban. De noche estan con liñas esperando, Pescando de los peces que picaban: Aquí pica el Patí, allí el Armado, Aquí tambien el Blanco y el Dorado.

Fuera del hotel, el matrimonio montó en un automóvil elegante. El español prefirió marchar á pie hasta la plaza de la Estrella, donde tomaría simplemente el Metro. Era una tarde primaveral, de aire suave y cielo dorado. Robledo marchaba con una vivacidad juvenil. La imagen de su infeliz camarada Torrebianca pasó de pronto por su memoria. Esto no era extraordinario.

Alejáronse por la galería, y Aldaba dijo al paje: Ya está el negocio... dentro de una hora; escucha bien, Cristobalillo: hay seis perdices; pero una sola está asada con aceite; ya conoces las perdices asadas con aceite. , hombre, . No basta decir ; ¿qué color tienen las perdices asadas con aceite? Un color así, dorado blanquizco.

De las interesantes notas con que ilustró Cean Bermudez los apuntes de Llaguno sobre los arquitectos y arquitectura de España, sacamos la siguiente noticia: Cuando el obispo Mardones intentó hacer el retablo de la catedral nueva de Córdoba, le inclinaron á que fuese de madera y dorado, como son casi todos los de las demas catedrales de España, diciéndole que seria menos costoso y se ejecutaria mas presto.

Brilla un sol de oro allí por sobre los árboles y sobre los pabellones, y es el sol argentino, puesto en lo alto de la cúpula, blanca y azul como la bandera del país, que entre otras cuatro cúpulas corona, con grupos de estatuas en las esquinas del techo, el palacio de hierro dorado y cristales de color en que la patria del hombre nuevo de América convida al mundo lleno de asombro, a ver lo que puede hacer en pocos años un pueblo recién nacido que habla español, con la pasión por el trabajo y la libertad ¡con la pasión por el trabajo!: ¡mejor es morir abrasado por el sol que ir por el mundo, como una piedra viva, con los brazos cruzados!

Su padre, administrador diocesano que había sido en aquella provincia, se murió el año anterior, dejándole una regular hacienda, setenta u ochenta mil duros, según los bien enterados. Este capital en Lancia le hacía un verdadero potentado. No hay para qué decir que fue el blanco de todos los tiros de las niñas casaderas, su ideal, su sueño dorado. Moro parecía poco inclinado al sexo femenino.

Como si hubiera dos, ó tres, ó quatro, dixo el anciano: vaya, que las personas de vuestro mundo hacen preguntas muy raras. No se hartaba Candido de preguntar al buen viejo, y queria saber qué era lo que pedian á Dios en el Dorado.

No se detuvo Candido en Burdeos mas tiempo que el que le fué necesario para vender algunos pedernales del Dorado, y comprar una buena silla de posta de dos asientos, porque no podia ya vivir sin su filósofo Martin.

Sus ojos estaban fijos en el féretro blanco y dorado que se mecía con el traqueteo de las ruedas, dejando en su memoria la impresión de una nubecilla surcada por rayos de sol. También debía estarse bien allí. Mejor que en los calabozos que antes contemplaba con envidia.

Otra era, á juicio nuestro, la finalidad que perseguía Estenoz; y aún á trueque de que se nos tache de excesivamente crédulos de cándidos, si se quiere afirmamos sin vacilar que su sueño dorado consistía en obtener la derogación de la llamada "Ley Morúa".