United States or São Tomé and Príncipe ? Vote for the TOP Country of the Week !


La Reina Doña Leonor, muy bizarra y lujosamente vestida y tocada, cabalgaba a la derecha del Rey. Les seguían y lo circundaban las principales damas de la corte y muchos egregios personajes del reino, ilustres por su nacimiento o por armas y letras. El hermano Tiburcio, convertido en escudero o doncel, era un prodigio para enterarse de todo a escape.

Y de allí zarpó la magnífica armada de dieciocho bajeles, tan poderosos y bien artillados que, como dice Gil Vicente en su auto, no podían menos de hacer temblar al turco. A poco de la partida de la Infanta doña Beatriz, la corte se fue a Cintra, deliciosa residencia de verano. Morsamor, como gran forastero, siguió a la corte, acompañado de su doncel Tiburcio.

Lo dicho, bella Constanza, estáis en mis tierras y no saldréis de ellas sin pagarme el tributo de vuestra hermosura. ¡Soltad, villano! exclamó ella. ¿Es esta vuestra hospitalidad? ¡Antes la muerte que cederos! ¡Soltadme, ó si no!... ¡Á , doncel! gritó desesperadamente al ver á Roger. ¡Amparadme, por Dios!

Primero, pagando tintas al doncel de los sabañones, y después a un vecino pingarronesco, Benigno averiguó cuanto a su amo interesaba, sin omitir los amores de don Quintín con Carola, trapicheo que sólo doña Frasquita ignoraba en el barrio: criadas, vecinos, porteros y parroquianos, todos sabían que el estanquero tenía, como ellos decían, un apaño.

De su mérito, como del de otros autores jóvenes, en no escaso número, de su tiempo, como D. José de Castro y Orozco, D. Eugenio de Tapia, D. Carlos Doncel, D. Tomás Rodríguez Rubí, D. José García de Villalta, D. Mariano Roca de Togores, D. Miguel Agustín Príncipe, D. Isidoro Gil, D. Ramón Navarrete y otros muchos, la posteridad más ilustrada é imparcial pronunciará su fallo definitivo, limitándonos nosotros ahora á mencionarlos, para que, juntamente con lo antes expuesto, se forme una idea aproximada de los muchos y valiosos poetas jóvenes que se consagran en España á la musa dramática.

Y nada diré de tu voz; nuestro coro pierde contigo el mejor de sus cantores. Sonrióse complacido el doncel y dijo: Á la paciencia del buen hermano Jerónimo debo también el oficio de grabador, que he aprendido pasablemente y llevo hechos muchos trabajos en madera, marfil, bronce y plata. Con Fray Gregorio he aprendido á pintar sobre pergamino, metal y vidrio.

Godoy Cruz, Correa, Villanueva, Doncel y muchos otros reunieron todos los libros que trataban de la materia, recolectaron de toda la América colecciones de metales diversos, registraron los archivos chilenos para informarse de la historia del mineral de Uspallata, y, a fuerza de diligencia, lograron entablar trabajos allí, en que, con el auxilio de la ciencia adquirida, sacaron utilidad de la escasa cantidad de metal útil que aquellas minas contienen, porque el mineral de Uspallata es un cadáver.

Mucho me placería practicar y aprender con tan gran maestro, dijo el doncel, pero mi deber me obliga á seguir á mi señor, por lo menos mientras dure la guerra. ¡Guerra, guerra! ¡Siempre lo mismo! exclamó Pisano.

Pero la corriente era poderosa y muy pronto comprendió el animoso doncel la dificultad de sostener á flote el cuerpo de Tránter y nadar al propio tiempo hacia la orilla. Á pesar de los más vigorosos esfuerzos no parecía ganar una línea.

La mayor parte de los espectadores preveían una lucha desigual, mas no faltaban dos ó tres lidiadores expertos que notaban con aprobación la firme mirada y los ágiles movimientos del doncel. ¡Alto, señores! exclamó Norbury apenas se cruzaron las espadas. El arma de Tránter es casi un palmo más larga que la de su adversario. Toma la mía, Roger, dijo Gualtero de Pleyel.