United States or Faroe Islands ? Vote for the TOP Country of the Week !


En la casa reina una abundancia incongruente. Suelen escasear, y aun faltar del todo, las cosas necesarias. El panadero y el carbonero son tan mal educados, que se atreven a quejarse de que no se les atiende con puntualidad. Célebre discurso de Pi. Junio. Reúnense las Cortes Constituyentes.

No exceptúo de esta regla ni á las mujeres de los más acérrimos republicanos federales, ni á las hermanas de los cuitados que en cierto pueblo de la costa repartieron hace algún tiempo Biblias protestantes, ni á las hijas de Constituyentes que en 1869 votaron la Libertad de cultos, ni á las madres de ninguno de ellos..... ¡Todas, todas las Granadinas son eminentemente católicas!

Bien podía la Asamblea constitutiva de la Unión del Norte de la costa ibérica que así se nombraba en sus documentos oficiales ocupar oronda y satisfecha el palco presidencial: pocas sesiones y breves horas le habían bastado para sentar las bases del gran contrato unionista federativo; actividad gloriosa, sobre todo comparándola con la flema y machaconería de aquellas holgazanas de Cortes Constituyentes, que tardaban meses en redactar un código fundamental y definitivo para la nación.

Honrado por las Islas Filipinas con el cargo de Diputado para representar sus derechos é intereses en las Córtes constituyentes, y deseando acreditar mi fina correspondencia al honor que merecí, con abandono y consiguientes perjuicios de mis intereses, á los quince dias de mi eleccion dejé las Islas y me embarqué para España, dando asi á mis comitentes una prueba nada equívoca de mis buenos deseos y disposicion de corresponder á la confianza que en depositaron.

El Libertador de la América del Sud, reducido ya á la simple condicion de ciudadano, el 8 de Mayo salió para Cartagena con objeto de pasar á Europa; y al despedirse de los constituyentes, herido en lo intimo de su noble corazon de patriota, no por su separacion del alto cargo que hasta alli habia ejercido, el cual tantas y tantas veces como al presente renunciara leal y dignamente, ni tampoco lastimado en su ambicion, puesto que solo se retiraba "rico de honores y de gloria;" pronunció estas notables palabras: Me ruborizo al pensarlo, pero la independencia es el único bien que hemos conquistado á costa de todos los demás.

Un hombre de aventajado talento ha dado á luz una historia del levantamiento y revolucion de España en la época de 1808; y sin embargo, al tratar de las Córtes de Cádiz, al traves del lenguaje anticuado, y del tono grave y sesudo, bien se trasluce el jóven y fogoso diputado de las constituyentes.

En el local que hemos descrito se reunía la ardiente juventud de 1820. ¿De dónde habían salido aquellos jóvenes? Unos salieron de las Constituyentes del año 12, esfuerzo de pocos, que acabó iluminando á muchos. Otros se educaron en los seis años de opresión posteriores á la vuelta de Fernando. Algunos brotaron en el trastorno del año 20, más fecundo tal vez que el del 12. ¿Qué fué de ellos?

Desde que las Cortes Constituyentes votaron la monarquía, Amparo y sus correligionarias andaban furiosas. Corría el tiempo, y las esperanzas de la Unión del Norte no se realizaban, ni se cumplían los pronósticos de los diarios. ¡Que hoy!... ¡que mañana!... ¡que nunca, por lo visto! ¡En vez de la suspirada federal, un rey, un tirano de fijo, y tal vez un extranjero!

Las Cortes Constituyentes eran un volcán, un respiradero del infierno para las negras sotanas que formaban corro en torno del periódico desplegado. Por cada satisfacción que les proporcionaba un discurso de Manterola, sufrían disgustos de muerte leyendo las palabras de los revolucionarios, que asestaban fuertes golpes al pasado.

Formó parte de las Cortes Constituyentes del 69, y de repente, cuando el asesinato de Prim, desapareció otra vez de Madrid, apareciendo a poco en Constantinopla de ministro plenipotenciario.