United States or Mali ? Vote for the TOP Country of the Week !


Y qué ¿de esta inquietud jamás postrada, de esta lucha sin tregua que en siento, de este loco y altivo pensamiento, ¿no habrá de quedar nada? ¡Nada!... ¿Nada... La pobre flor en el pensil tronchada, deja sus hojas y su aroma al viento; la ola al besar la playa, su lamento deja, y la linda concha nacarada.

La sala está en lo de delante del velador, y tiene en medio una mesa, con el pie hecho de un carretel de hilo, y lo de arriba de una concha de nácar, con una jarra mexicana en medio, de las que traen los muñecos aguadores de México: y alrededor unos papelitos doblados, que son los libros.

Y como su memoria no era bastante fuerte, y por otra parte el miedo se la obstruía, aquello era un incesante machaqueo. Aún peor si se las tomaba su madrina. Concha era fríamente cruel; no levantaba la mano sino cuando cometía la falta, como una máquina de castigar.

A la hora de costumbre fue llamada al comedor para dar sus lecciones. Concha se acomodó en su silla y con no disimulado regodeo sacó del pecho la fatal ballena. Aquel día le pedía el cuerpo un razonable desahogo de golpes. La niña se acercó a ella temblando como siempre y le entregó los libros.

Luego vuelve al lado de Azorín. El telón se ha levantado. El viejo dice: ¿Usted no conoce esta obra? Es preciosa; yo se la vi estrenar a Caltañazor, a Becerra, a la Ramírez, a la Di Franco, que entonces era una niña... Camprodón tenía mucho talento. Yo conocía también a su mujer, doña Concha...

Mientras estuvo ese sitio encerrado en su concha interior, ofrecía el contraste de un mar tranquilo y profundo, absoluto, á dos pasos de un mar terrible.

Pero mamá dijo Amparo , si esto que cantaba es el Aria de las joyas. Muy bonita.... Pues fuera el aria. Canta algo más alegre. Eso de El dúo de la Africana, que gustó tanto en casa de «las magistradas». Bueno exclamó Concha con rudeza . Ahora El dúo. Una cosa que están cansados de tocar todos los organillos. Pues señora, eso. Tu tío no va al teatro, y tendrá gusto en oírlo.

Es cierto respondió el Capitán . Primero examinan su cuerpo para asegurarse de la belleza de la concha, y practicándole una incisión junto a la cola ven la calidad y cantidad de aceite que puede producir. Si es escasa o de inferior calidad y además el animal está delgado, vuelven a darle libertad para que engorde. ¿Y si, estando delgadas, tienen la concha hermosa?

La pobre Concha cayó en sus brazos por generosa y amante, no por interesada. Fue una luna de miel. Romadonga, en la alegría de su conquista, se dejó arrastrar a mil delicadas atenciones, demostrando cerca de ella una asiduidad que rara vez había tenido con otras. Iba a su casa dos o tres veces al día; apenas salía de allí.

Su comercio consiste en arroz, café, balate, cera, biao, almáciga, carey, concha, nacar y petates. Su industria se reduce á los tejidos de algodón y abacá, que coloran con el jugo de algunas plantas, á la fabricación de armas blancas y á la explotación de minas de plata y otros metales que se encuentran en sus dominios.