United States or Bulgaria ? Vote for the TOP Country of the Week !


Los ojos de ciertos peces, colocados al final de varillas separadas del cuerpo, brillaban como diamantes en los extremos de un doble alfiler. Las glándulas salientes, las verrugas, las sinuosidades dorsales, tomaban coloraciones de joyería. Pero las piedras preciosas de la tierra son minerales muertos que necesitan el rayo de luz para existir con breve chisporroteo.

El cielo se había calmado, los amarillos nubarrones habían desaparecido: coloraciones rosadas, y verdes, purísimas, iluminaban el occidente. El Príncipe continuó: El rencor, el odio, la envidia, la concuspicencia, todas las miserias que habían formado mi vida, se me aparecieron por fin bajo su luz sombría.

El maná imperceptible y cristalino alimentaba su cuerpo de campanario tumbado, haciendo circular bajo la piel grasosa ríos purpúreos de sangre caliente. La transparencia de los seres planctónicos evocaba en la memoria de Ferragut las coloraciones maravillosas de los habitantes del mar, ajustadas exactamente á las necesidades de su conservación.

En las grandes canastillas, que se destacaban sobre el fondo de césped, las pálidas eglantinas, a la menor brisa otoñal, soltaban sus frágiles pétalos, las verbenas se arrastraban lánguidas, como cansadas de vivir, descomponiendo con sus caprichosos tallos la forma oval del macizo; los ageratos se erguían, todos llovidos de estrellas azules y los peregrinos colios lucían sus exóticos matices, sus coloraciones metálicas y sus hojas atigradas, semejantes a escamas de reptil, ya blancas con manchas negras, ya verdes con vetas carne, ya amaranto obscuro cebradas de rosa cobrizo.

Las sombras surgían ya más densas de la cuenca del lago. Las nubes, antes doradas, se habían puesto grises, y sólo en algunas fajas cobrizas y violáceas se veía que la luz no había muerto del todo. Un reflejo de aquellas coloraciones daba al agua estancada los tonos de una lámina metálica.

Se reveló ahí, fabricante de genio, creador de obras maravillosas; así en los vitraux, inspirados en las antiguas cristalerías, como en los vasos y bibelots de alto precio, de formas exquisitas, de coloraciones raras, sus creaciones obtuvieron éxito creciente entre los buenos conocedores. Seguro de su porvenir, se casó. La mujer que eligió era hermosa, inteligente y buena.

El aire circula por doquiera, extendiendo una atmósfera perceptible por cima de aquel paisaje que se aleja a distancias tremendas, bañándole de claridades, de corrientes y de frescor, envolviendo las formas, acariciando los contornos, reposando y enlazando entre las coloraciones graves, calientes, opulentas, en que aquí y allá discretamente se intercalan algunas notas claras para fundirlas en amplia y poderosa armonía». Finalmente Beruete cree que «acaso la crítica moderna pueda censurar la iluminación oblicua de Las Lanzas y sostener que no es la suya la luz solar, la luz difusa del aire libre tan en boga en nuestros días».