United States or Burkina Faso ? Vote for the TOP Country of the Week !


Araceli añadió respirando con fuerza , esta noche no estoy para bromas. ¿Crees que soy Currito Báez? Lord Gray repuse tampoco yo estoy para bromas. Todavía dijo con amargo desdén no he gustado el placer de matar a un deshacedor de agravios propios y amparador de doncellas ajenas. Maldito sea yo, si no es noble y nuevo lo que inflama mi espíritu en este instante.

Espero adquirir de aquí a mañana tanta destreza como mi maestro. Empezamos a tirar. ¡Oh, qué fuerte está usted, amigo! dijo al recibir una estocada medianilla. No estoy mal, no. ¡Pobre Currito Báez! . ¡Pobre Currito Báez! Mañana veremos.

Usted mismo me ha puesto al corriente de sus aventuras. Vamos, amigo mío, seamos francos. ¿No me dijo usted mismo que pensaba llevársela a Malta? Lord Gray sonrió. Yo no he dicho eso exclamó vacilando. Usted... usted mismo. Y yo prometí ayudarle en la empresa, a cambio de su auxilio para matar a mi aborrecido rival Currito Báez. Es verdad dijo riendo . Bien, amigo mío.

Señorito D. Diego dijo el pícaro no me comprometeré yo a decirle dónde está, manque me diera esos cuatro soles de plata mejicana, porque María Encarnación salió de aquí con Currito Báez, y tomando hacia la calle del Torno de Santa María... cétera, cétera. Entraron varios majos ya de nosotros conocidos, y D. Diego les convidó a beber, lo cual lejos de molestarles les causó muchísimo agrado.

Yo le ayudaré a usted en esa empresa, que no será fácil por desgracia. No lo será... veremos repuso exaltado después de beber con ardiente anhelo . Yo le ayudaré a usted a matar a Currito Báez. , le mataré; así tuviera mil vidas.

No es preciso fijar sitio repuse . Yo tengo la seguridad de que nos encontraremos. Una súplica tengo que hacer a usted. Mi espada no es buena. ¿Quiere usted prestarme esa magnífica hoja toledana que está en la panoplia? Con mil amores: ahí va. Diómela, y cambié su arma por la mía. ¡Pobre Currito Báez! dijo riendo . Han fijado ustedes el duelo para esta noche.

Yo quiero matar a ese hombre, o que él me mate a . No, a él, a él. ¡Pobre Currito Báez! Le mataré, le mataré, exclamaba yo con furor, poniendo mi puño cerrado en el pecho de lord Gray . ¿No siente usted cómo baila el mundo bajo nuestros pies? El mar entra por esa ventana. Ahoguémonos juntos y todo se concluirá. ¿Ahogarme? No dijo el inglés . Yo también amo.

Me mortifica, me pone nervioso y colérico el ver que hay alguien que posee una parte de mi secreto. Ahora no pensemos más que en Currito Báez. Amigo, siento deseo irresistible, anhelo profundo de matar a un hombre. Yo también. ¿Cuándo le despachamos? Mañana por la noche se lo diré a usted. ¿Quiere usted que le ejercite un poco en la esgrima? Nada más oportuno. Vengan los floretes.

¡A ese, a ese! dije sintiendo que se me despejaban un tanto los aposentos altos. Cuente usted conmigo. Currito Báez, que así se llama el jerezano, es un necio presumido y matasiete, que con todo el mundo arma camorra. Deseo tener cuestión con él. Le provocaremos. ¡Le provocaremos, , señor; le provocaremos!