United States or Costa Rica ? Vote for the TOP Country of the Week !


¿Y no le dolía á usté antes? No tanto como ahora. Pues chumpe usté un higo paso, que es muy bueno para los flemones. Muchas gracias. Conque hasta mañana, que voy á por los orejones. ¡Vaya usted con Dios! Escribir un libro de costumbres montañesas y no dedicar algunas páginas á la costurera, sería quitar á Santander uno de los rasgos más característicos de su fisonomía.

No hay que afligirse demasiado dijo Montiño , nacemos para morir y mi hermano era viejo. ¿Y durará mucho tu ausencia, Francisco? dijo Luisa. Mañana, á más tardar, estaré de vuelta. Saca mi loba de camino, Inesita; y mis botas, yo voy por mis pedreñales, siempre es bueno ir bien preparado. Y Montiño abrió una puerta con una llave que sacó de su bolsillo, y entró y cerró.

Quedamos, pues, convenidos en que yo sería su intérprete y en que nos trataríamos como viejos amigos. Ellos correspondieron tan bien á mis deseos, que hoy, al cabo de mucho tiempo, veo en ámbos dos personas que no me dejarán nunca olvidar cuanto hay en Francia de bueno y honorable.

Una ilusión, engañarme a sabiendas, y luego frialdad, esquivez, cada uno por su lado; él, quien sea, rico, poderoso con lo mío, buscará en otras los encantos que yo no tengoDice que para las que no son hermosas como ella, solo hay un esposo bueno, el que no engaña; ¡y lo dice con una unción, con un fervor! Otras veces habla de la casa y de nosotros con un despego que da frío.

El fin de la espléndida visión fue que el Rey le dijo al bueno de Mordejai que de las dos cosas que deseaba, riquezas y mujer, no podía darle más que una; que optase entre las pedrerías de gran valor que delante miraba, y con las cuales gozaría de una fortuna superior a la de todos los soberanos de la tierra, y una mujer buena, bella y laboriosa, joya sin duda tan rara que no se podía encontrar sino revolviendo toda la tierra.

Canta, pero no la oímos bien... No; no se acerque: la vamos a espantar como el otro día... Bueno; que le vaya a usted bien: mucha suerte.

Más de una hora llevaba ante la mesa escribiendo sin cesar, conversando pluma en mano con su Augusta, con toda la familia que vivía en Cassel. Mejor era que se llevase lo suyo este hombre bueno, que los otros oficiales altivos, de voz cortante é insolente tiesura...

Anduvo muy bueno este día en dar orden, y todo lo demás que se debía á su cargo y reputación. Toda la gente se embarcó, sin que los enemigos hiciesen más mal, aunque al embarcar, por darse algunos más priesa que era menester, hubo alguna desorden. Aquella misma noche se fueron las galeras y vinieron el día siguiente á hallar las naves surtas en los Secos.

¡Bueno! dijo ; es, únicamente, un caballero andante; no tolerará que la mujer a quien ha amado se muerte por sus hermosos ojos. ¡Son tan bestias los hombres! ¡Si yo fuese tan bonita como , los haría correr! Mientras tanto, hija mía, seremos nosotras las que corramos; y desde mañana mismo. ¡Pues bien, ! ¡en marcha!

Después punto en boca. ¿Qué casa era esa de la Concepción Jerónima...?». Pero, hija, ¿qué te importa?... Bueno, te lo diré. No tiene nada de particular.