United States or Paraguay ? Vote for the TOP Country of the Week !


La marquesa se adelantó entonces, y sin asco ni temor apretó entre las dos suyas aquellas manos sudorosas. ¡María!... ¡María!... exclamaba Diógenes. ¿Qué es eso, Perico?... ¿Qué es eso, hombre? decía ella dulcemente, inclinando su rostro lleno de lágrimas sobre el desencajado del viejo.

Después, durante algunos momentos, permaneció inmóvil; pero aquel grito lo había librado de la primera opresión de la verdad, opresión que lo sofocaba, se volvió, adelantó vacilante hasta su telar y se sentó en el banco en que trabajaba habitualmente, buscando instintivamente aquel sitio, porque era para él la más grande certidumbre de la realidad.

Al sentir ruido, Lázaro alzó la vista, y viendo a Josefina, adelantó algunos pasos, mientras ella permanecía callada y quieta, recostada en el quicio de la puerta. Lo que allí pasó fue triste, silencioso, casi horrible. El confidente se trocó en capellán, el amigo dejó su puesto al ministro del cielo.

La misma dificultad que se ofrece con respeto á los otros sentidos existe en cuanto al oido; si dudo del testimonio de tres, ¿por qué no dudo del de cuatro? No adelanto pues nada con el raciocinio; este me conduciria á cavilaciones tales, que me exigirian una duda imposible, que me arrancarian una seguridad de que no puedo desprenderme por mas esfuerzos que haga.

Con el adelanto de la inteligencia, la bondad y la sensatez humanas; con la creciente abundancia de producciones en perspectiva por el desarrollo de las artes y las ciencias; que acabarán por suprimir la ignorancia, el vicio, el crimen, el dolor y la miseria; con la atenuación progresiva de las desigualdades del presente, que son el fruto de las iniquidades del pasado, por el mejoramiento incesante de la capacidad moral del individuo, se perfila en lontananza un tipo de hombre superior, que, sabiendo extraer del lado noble de la naturaleza humana todo el bienestar a que aspire, no sentirá la necesidad de que sus buenas acciones sean premiadas con recompensas desproporcionadas, ni castigadas con penas eternas los que le causen males pasajeros.

Doña Juana se puso encarnada, hizo una profunda reverencia al duque de Gandía, y adelantó con menos apresuramiento hasta su padre, y se arrodilló y le besó la mano. ¿Te han dicho que no volverás al convento, hija? la preguntó el conde. , señor. ¿Y te pesa? No, señor. Dilo sin reserva, sin temor. Yo no tengo más voluntad que la de mi buen padre. Se trata de que cambies de estado.

Entonces se levantó Carmen, y trémula y sonrojada, se adelantó hacia el joven, e inclinando los ojos, le dijo: , Pablo, te pedimos perdón; yo te pido perdón por lo de hace tres años ... yo soy la causa de tus padecimientos ... y por eso, bien sabe Dios lo que he llorado. Te ruego que no me guardes rencor. La joven no pudo decir más, y tuvo que sentarse para ocultar su emoción y sus lágrimas.

Se adelantó entonces Tiburcio, y, sirviendo de intérprete, en vulgar dialecto indostaní, preguntó al viejo quién era él y en qué país se hallaban ellos. El viejo contestó al punto en un idioma de cuyos vocablos no sabían uno siquiera ni Tiburcio, ni Morsamor, ni ninguno de los que iban acompañándolos. Pero esto fue lo más raro y maravilloso.

El bufón adelantó, y en un momento en que la Dorotea estaba de pie, inmóvil, con la cabeza inclinada, sostenida sobre una de sus manos, con el otro brazo abandonado á lo largo del cuerpo, era un vivo trasunto de una estatua pagana, representando á una mujer maldecida por los dioses y meditando de una manera terrible, blasfema é impía, sobre la causa de su desgracia. El bufón se acercó á ella.

Cuéntanse diferentes líneas de ómnibus que hacen el servicio entre la ciudad y los arrabales: yo me detengo á hacer mencion de esto, porque es un adelanto en una ciudad tan alejada del movimiento europeo.